Por sólo 50 euros, la Universidad de León le dará al "profesorado en activo y al futuro profesorado de herramientas pedagógicas para trabajar en todas las materias escolares una educación antifascista ante los discursos de odio".

A través de la Microcredencial Universitaria en Pedagogía Antifascista, se trata de "promover en el profesorado en activo y el futuro profesorado habilidades y estrategias pedagógicas que mejoren el aprendizaje en valores, mediante una educación crítica y comprometida con los derechos humanos y el bien común, y que prevengan el crecimiento y auge del neofascismo"

Echemos a continuación un vistado al Plan de Estudios (ver documento adjunto):

Bloque 1. Introducción al neofascismo Unidad 1. Qué es el neofascismo

Bloque 2. Neofascismo y educación

Unidad 2. La penetración del neofascismo en la educación I

Unidad 3. La penetración del neofascismo en la educación II

Bloque 3. Pedagogía antifascista

Unidad 4. Estrategias educativas frente al neofascismo I

Unidad 5. Estrategias educativas frente al neofascismo II

Unidad 6. Estrategias educativas frente al neofascismo III

Unidad 7. Estrategias educativas frente al neofascismo IV

Bloque 4. Propuesta didáctica de pedagogía antifascista Unidad 8

Una educación antifascista 

 

Las prácticas, suponemos que se ofertarán, pongamos, durante alguna charla de Vito Quiles, en alguna universidad, donde, recientemente, no ha podido desarrollarlas debido a la presencia de grupos radicales de izquierda.

No se especifica, pero no nos extrañaría que, ahora que Pablo Iglesias ya no es profe asociado en la Complutense de Madrid, sea uno de los docentes encargados de impartir tales contenidos, como experto en la materia 'antifascista', acompañada de exquisitos modales. 

Y, si la microcredencial se convirtiera en macrocredencial podrían, por ejemplo, extenderla al mundo de la comunicación y contar con insignes profesores como el periodista Javier Ruíz, uno de los representantes de la televisión pública de todos -con permiso de José Pablo López- RTVE.

No se apuren que aún hay tiempo, hasta el próximo 11 de enero, para inscribirse y luchar contra el fascismo y el odio, en auge en esta sociedad.