Decíamos ayer que, entre los delitos que enumeraba el diputado de Vox en Cataluña, Juan Garriga, se encontraba un apuñalamiento por parte de un mantero senegalés a un operario de limpieza en Cambrils (Tarragona).
La víctima, un hombre de unos 47 años, sufrió varias heridas por arma blanca. Según fuentes policiales, el empleado de la empresa concesionaria Secomsa se encontraba realizando labores de limpieza con una máquina sopladora en la vía pública. Varios testigos relataron que la presencia del trabajador habría incomodado al mantero, quien ocupaba ese espacio con su puesto de venta ambulante ilegal.
El hermano del agresor, durante su intervención en 'Código 10', de Cuatro, explicó que dicho agresor era reincidente:
Un inmigrante que apuñala a un ciudadano debe inmediatamente ser deportado.
— Bertrand Ndongo (@bertrandmyd) June 11, 2025
Como no lo hicieron y lo sacaron a la calle, pues un pobre barrendero que estaba haciendo su trabajo, ha sido su segunda víctima.
Atentos al testimonio del hermano del agresor😡😡😡👇🏿👇🏿 pic.twitter.com/5uDOBRYv8Z
Repetimos la idea que expusimos ayer en estas pantallas: Cuando el Estado no cumple su deber de defender a los ciudadanos, estos se toman la justicia por su mano. Y está pasando cada vez más.
