Al presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, una cosa hay que reconocerle: tiene la gran y maravillosa habilidad de sacar de quicio a todo el progresismo con su mera presecia... y esto se agradece. 

En ese odio ciego hacia el republicano, ayer martes la izquierda se tomó su 'revancha' particular. A su llegada a la 80.ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas curiosa, casual y fortuitamente se rompieron las escaleras mecánicas, y más, también de manera inesperada, se apagó el teleprompter cuando Trump tenía que hablar. Hechos que no pararon al presidente estadounidense: “No me importa dar este discurso sin teleprompter. Me gusta, porque así hablo desde el corazón. Sólo puedo decir que quien esté manejandeo ese teleprompter está en serios problemas”, aseguró para, al tiempo, criticar que "todo lo que le ha dado la ONU son unas escaleras rotas... si la Primera Dama no estuviera en forma, se hubiera caído. Pero está een plena forma, ambos estamos en plena forma".

Estos dos hechos no hicieron que Trump perdiera los nervios o se viniera abajo, todo lo contrario, como afirmó "habló desde el corazón" y su corazón lanzó una enérgica reprimenda al "globalismo destructivo" y presentó "una visión audaz para que las naciones soberanas se unan contra las verdaderas amenazas del terrorismo, la migración descontrolada, la guerra biológica y la pérdida de identidad cultural". 

Trump se proclamó con el presidente pacifista que es, y reclamando a la ONU que no le ayudaron para acabar con ninguna de las siete guerras a las que ha conseguido poner fin: “En tan solo siete meses, he puesto fin a siete guerras interminables… Ningún presidente ni primer ministro —y, de hecho, ningún otro país— ha hecho jamás nada parecido… Es una lástima que yo tuviera que hacer estas cosas en lugar de que las hicieran las Naciones Unidas, y lamentablemente, en todos los casos, las Naciones Unidas ni siquiera intentaron ayudar.” 

Hecho que le lleva a preguntarse "¿Cuál es el propósito de las Naciones Unidas? La ONU tiene un potencial tremendo... Parece que lo único que hacen es escribir una carta contundente y luego no le dan seguimiento. Son palabras vacías, y las palabras vacías no resuelven la guerra". "Un futuro mucho mejor está a nuestro alcance, pero para lograrlo, debemos rechazar los enfoques fallidos del pasado y trabajar juntos para enfrentar algunas de las mayores amenazas de la historia. Mi postura es muy simple: nunca se puede permitir que el principal patrocinador mundial del terrorismo posea el arma más peligrosa", ha añadido. 

Por si faltaran más explicaciones, Trump ha evidenciado a los países, entre ellos España, que han reclamado el reconocimiento del Estado palestino: "Ahora, como para alentar la continuación del conflicto, algunos miembros de este organismo buscan reconocer unilateralmente un Estado palestino… En lugar de ceder a las exigencias de rescate de Hamás, quienes desean la paz deberían unirse en un solo mensaje: ¡liberad a los rehenes ya!".

"China e India son los principales financiadores de la guerra en curso al seguir comprando petróleo ruso, pero, inexcusablemente, ni siquiera los países de la OTAN han cortado gran parte del suministro energético ruso".

Por ello, el republicano ha cargado contra la inmigración masiva y la invasión silenciosa que sufre Europa: "La ONU no solo no resuelve los problemas que debería, sino que con demasiada frecuencia nos crea nuevos problemas que debemos resolver... La ONU está financiando un ataque contra los países occidentales y sus fronteras... Se supone que la ONU debe detener las invasiones, no crearlas ni financiarlas. Lo que hace al mundo tan hermoso es que cada país es único, pero para que siga siendo así, cada nación soberana debe tener derecho a controlar sus propias fronteras. Cuando sus cárceles están llenas de los llamados 'solicitantes de asilo' que devolvieron la bondad con el crimen, es hora de poner fin al fallido experimento de las fronteras abiertas. Cualquier sistema que resulte en el tráfico masivo de niños es inherentemente maligno; sin embargo, eso es exactamente lo que ha hecho la agenda migratoria globalista. A todo matón terrorista que introduce drogas tóxicas en Estados Unidos, les advierto: los borraremos de la existencia". 

También cargó contra el ecologismo y la "estafa de la energía verde", advirtiendo que, o se alejan, o "su país fracasará", y alertando de que lo mismo ocurrirá si "no detienen a personas que nunca han visto y con las que no tienen nada en común", y es que a su parecer, "el concepto globalista de pedir a las naciones industrializadas y exitosas que se inflijan dolor y alteren radicalmente sus sociedades debe ser rechazado total y completamente, y debe ser inmediato. El desafío con el comercio es muy similar al del clima: las fábricas de los países que siguieron las reglas han sido saqueadas... por países que las rompieron. Por eso Estados Unidos ahora está aplicando aranceles a otros países".

Y animó a Europa a defenderse, mostrándose favorable a que los países de la OTAN derriben aviones rusos si ingresan en su espacio aéreo.

Como han podido leer y ver, Trump no se cayó nada, pero seguramente, lo que más molestó a la progresía fue su última frase: “Juntos, defendamos la libertad de expresión. Protejamos la libertad religiosa, incluyendo la religión más perseguida del planeta hoy en día: el cristianismo”. Sí, Trump fue a la ONU y habló de Dios y el cristianismo y eso es gravísimo, incluso fascista.