Esta misma mañana en Hispanidad les contábamos que la Sociedad Europea de Psiquiatría Infantil y Adolescente (ESCAP) ha publicado una declaración conjunta con firmas de varios psiquiatras para pedir a los proveedores de atención médica "que no promuevan tratamientos experimentales e innecesariamente invasivos" en trans. 

El documento se motiva por el aumento de casos que se está experimentando en la sociedad y que ha llevado a varios países a dar marcha atrás en sus legislaciones porque se plantean si este fenómeno es una moda impulsada por las propias normas, que confunde a los menores especialmente. Uno de esos países es Reino Unido.

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La noticia de hoy es que según informa el diario The Times, el Gobierno de Rishi Sunak prohibirá la habilitación de baños unisex o de "género neutro" en bares, restaurantes y oficinas de nueva creación o empresas y locales de hostelería que hagan "reformas importantes" a partir de finales de este año.

Con esta medida se busca "aumentar la seguridad, privacidad y dignidad" de las mujeres. Este tipo de negocios solo podrán disponer de aseos diferenciados de mujeres y de hombres o, en caso de que no les sea posible, de instalaciones universales, con un solo retrete, lavabo y secador de manos tras una puerta con cerradura.

No es la primera medida del Gobierno de Sunak: la Seguridad Social británica confirmó que las clínicas de identidad de género dejarían de recetar fármacos bloqueadores de la pubertad a los menores. Además publicaba una guía con nuevos protocolos escolares ante casos de disforia de género, dando un paso atrás para ser cautos con un tema tan importante y con consecuencias tan irreversibles como es el cambio de sexo.

Ahora, hace unos días el Servicio Nacional de Salud informó sobre las medidas que va a tomar contra la ideología transgénero en los hospitales, "prohibiendo términos como «alimentación torácica»", anunciando cambios en la normativa del NHS que establece los derechos de los pacientes.

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Así, se acabará con términos usados en la red de centros del NHS como: «madres o padres parturientos», «alimentación pectoral» y «maternal y parental». Y es que en los Hospitales podías elegir si decir «leche materna» o «leche humana» o «leche pectoral» o «leche del progenitor lactante». Además, se hará hincapié en la importancia de utilizar un lenguaje «específico para cada sexo» en los servicios sanitarios. Y se prohibirá que los varones trans reciban tratamiento en las salas de hospitalización femeninas.