En México se libra una batalla en defensa del no nacido
Como publicó Hispanidad en su día, el balance del anterior presidente mexicano, el ultraizquierdista Andrés Manuel López Obrador, al término de su mandato fue desolador: 90 homicidios diarios y el impulso de leyes abortistas en los estados.
Concretamente, bajo la presidencia de AMLO, el aborto en el país cobró un nuevo impulso mediante iniciativas de su partido, MORENA, hasta el punto de que desde el 2018 hasta el 2024, las cámaras de varios estados aprobaron la legislación abortista de despenalizarlo hasta las 12 semanas de embarazo y otro estado -Sinaloa- lo amplió hasta las trece semanas. El último estado en hacerlo fue Zacatecas, que despenalizó el aborto hasta las doce semanas de gestación.
Y, como no podía ser de otra manera, pues la nueva presidenta mexicana es discípula de López Obrador, bajo mandato de Claudia Sheimbaum esta tendencia abortista ha seguido su recorrido.
Concretamente, en los últimos dos días, los estados mexicanos de Chiapas y Estado de México aprobaron reformas para despenalizar el aborto hasta las 12 semanas de gestación, recoge Aciprensa.
De esa forma, México ha alcanzado ya los 19 estados con legislaciones abortistas similares.
Y, lamentablemente, este país cada vez entra más de lleno en la cultura de la muerte...
Pero como dice el actor y productor mexicano Eduardo Verástegui:
El aborto no es una cuestión de salud pública. Nunca lo será. No hay nada saludable en un crimen. Abortar es matar a un bebé.
— Eduardo Verástegui (@EVerastegui) December 2, 2021
El crimen del aborto, ¿derecho humano? No es ni derecho ni humano tener licencia para matar a un ser humano. Peor aun, cuando es el más indefenso de todos.
— Eduardo Verástegui (@EVerastegui) October 12, 2021