Acomplejado Feijóo/ Foto: Pablo Moreno
Como lo de Sánchez ya empieza a ser de tebeo, Núñez Feijóo decidió trabajar en domingo. Mejor, que trabajen los suyos. Así, el domingo 13 convocó en Génova a su Comité de Dirección, ante la deriva socialista realmente enloquecida.
Y esto es bello e instructivo, porque demuestra que los problemas de España pueden ser ciertos -el problema es Sánchez- y su solución falsa, pues la presunta solución se llama Alberto Núñez Feijóo.
Apertura de El Mundo, el domingo 13. Ojo al dato: "Feijóo mete presión a los socios de Sánchez: 'No tiene el control'". Pues no, no lo tiene. Ahora bien, en serio: ¿Quién le ha dicho a Feijóo que el PNV o Junts, algún día, se irán con él? Jamás la derecha podrá darles lo que les ha dado, y les da, el Sanchismo.
La única forma que tiene el PP para echar al Sanchismo es conseguir, junto a Vox, no junto al PNV, la mayoría absoluta. Otra cosa es que le convenga a Vox
Es una muestra más de que Feijóo no nos sirve: falla en el fondo y en la forma. Me explico. Fondo:
La única alternativa política posible en España consiste en unir cristianismo político y liberalismo económico (no capitalismo), pero el PP es hoy una socialdemocracia progre de derechas. Reniega de la esencia de España, que no es otra cosa que los principios cristianos. Por ejemplo no se aleja de la ideología de género y sobre el derecho a la vida piensa lo mismo que el PSOE, con la única diferencia de que el PSOE lo exhibe y el PP lo esconde, porque no puede escupir, al menos en público, sobre su pasado.
Al tiempo, los peperos viven cómodos en la política económica de subvención y voto cautivo, así como en la no-reducción del gasto público que, sí o sí, conllevará, al igual que el resto de Europa, la eliminación progresiva del Estado del Bienestar.
Sobre todo, el PP no cree en la propiedad privada sino en la empresa privada cuanto más grande mejor y en las unidades económicas públicas, como la educación y en la sanidad públicas, por ejemplo.
Creen en definitiva en lo grande y desconfían de lo pequeño. Por ejemplo, desconfían de la pyme, de los profesionales, de los autónomos, que son la verdadera propiedad privada, los que trabajan y no se quejan y los elementos más productivos del país. Han olvidado que la propiedad privada es como estiércol: estupenda, siempre que esté bien repartida entre todos.
¿Quién le ha dicho a Feijóo que el PNV o Junts, algún día, se irán con él? Nunca la derecha podrá darles lo que les ha dado, y les da Sánchez
Por tanto no hay alternativa de fondo en Feijóo, pero es que tampoco la hay de forma. Por una razón: la única forma que tiene el PP para echar al Sanchismo es conseguir, junto a Vox, no junto al PNV, la mayoría absoluta. Otra cosa es que esto le convenga a Vox, pero de humedades hablaremos luego.
Pues bien, Feijóo se dedica a pasarle la mano por el lomo a PNV y a Junts, aunque ambos le desprecian.
En suma, Feijóo es un bluf, en forma y fondo. Si logra llegar al poder será en minoría y no cambiará nada. Durará hasta la próxima moción de censura que el PSOE, que tiene memoria, repetirá para, como Sánchez gobernar España con los enemigos de España.
Señores: lo único que está ocurriendo en el escenario político patrio es que Juan Español se está dando cuenta de la calamidad que es Pedro Sanchez, que simplemente está encanallando España y haciéndola irrespirable. Pero su encanallamiento no hace bueno a un estafermo como el señor Feijóo. A lo mejor salimos del fuego para caer en las llamas.