La ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y el ministro de Economía, Empresa y Comercio, Carlos Cuerpo, tras la firma de los convenios
Préstamos ICO -o sea crédios blandos que pagamos entre todos- para finacniar la construcción y la compra de viviendas en alquiler para los desheredados de la fortuna. Naturalmente, ahí estaba Sánchez para demostrar que él está con el pueblo, sobre todo con el dinero de su pueblo.
Al Sanchismo no le gusta la propiedad privada -liberalismo- pero sí la empresa privada financiada públicamente, -capitalismo-. Insisto: liberalismo y capitalismo no son lo mismo. Liberal es el que defiende la propiedad privada, capitalista es el que defiende la empresa privada y los mercados privados.
No, no es lo mismo. Piensen en un carterista: puede resultar un gran defensor de la empresa privada pero nunca se le podrá considerar un defensor de la propiedad privada. Pues eso.
Pedro Sánchez, digo, ha presidido la firma de la línea de financiación ICO con fondos europeos. Por cierto, ¿recordamos que los fondos europeos los pagaremos a escote, vía presupuesto europeo, en un 40% y que el otro 60% son créditos que devolveremos... ampliados y con intereses?
Quiero decir que el Bálsamo de Fierabrás que nos vende Moncloa no es otra cosa que un dinero prestado o anticipado que tendremos que devolver, en buena parte, insisto, con intereses.
Pero volvamos al plan de vivienda. Lo que falta en España son viviendas, pero el español siempre ha querido tener una vivienda en propiedad. ¿Por qué condenarle a no tener nada en propiedad y a vivir permanentemente en alquiler?
¿No sería mejor volver a la antigua vivienda de protección oficial, destinada a la propiedad, no al alquiler? Construya usted viviendas, eso está bien y deje que el español decida si quiere vivir en propiedad o en alquiler. A lo mejor nos sorprendemos y resulta que quiere esforzarse por obtener su vivienda en propiedad.
No, Sanchez no es liberal pero sí capitalista.