Sr. Director:

Creo que ya es hora de que nuestro arco político se normalice y deje de haber en él anormalidades que dañan la vida social y administrativa de España reduciendo al mínimo nuestro prestigio y calidad; forman parte de ello desde filoetarras, independentistas, golpistas, ultraizquierda bolivariana, etc. Es un azote permanente el que tenemos con esta situación.

Pero con el volantazo practicado por el PP, puede que se subsane este problema y los votantes que huyeron despavoridos, vuelvan a recobrar la confianza en él. Cuando Casado fue designado presidente, prometió concedernos a los españoles algo que, en muy poco tiempo desechó: “el derecho a la vida”. Confío en que Núñez Feijóo, con sentido común y dignidad, respete “la vida” e indulte la de todos los niños por nacer que, sin culpa de nada, sean condenados a muerte (aborto) y la de los mayores que, por la desatención de la sanidad eligen suicidarse (eutanasia).

Son muchas las fechorías que el actual gobierno, con acusado desacierto, nos ha hecho a los españoles. Estas son consecuencia de la inutilidad de sus componentes, en especial del presidente, unas veces y otras por la excesiva ideología con la que impregnan todo su mandato. Tenemos una gran confianza en que el nuevo PP tendrá más sensatez que el anterior y, sobre todo, que el actual equipo de gobierno radical de izquierda que sufrimos. España no se merece esto que tenemos y se hace preciso mandar a sus casas a los que ahora, entre mentiras, triquiñuelas e ideología pérfida, nos están maltratando y perjudicando.