Bruselas se pliega a la petición de la multinacional y le dos semanas más para contestar a las acusaciones de abuso de posición dominante.   El caso se remonta a abril, cuando la Comisión Europea le plantó los cargos por ningunear a sus rivales en su servicio de comparación de precios (Google Shopping), manipulando los resultados de su buscador. La multinacional se defendió, pero sirvió de poco. La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager (en la imagen) ha sido, cuando menos, más perseverante y tenaz que su predecesor en el cargo, Joaquín Almunia y la investigación a Google, en este caso concreto y otros, promete. En fin, la multinacional -enredada ahora en los cambios de nombre- pidió más tiempo para preparar su defensa y Bruselas se lo ha dado. Poco más, dos semanas. Tendrá que responder el próximo día 31 y no el 17, como estaba previsto. Lo que Google se juega no es poco. Aparte del daño reputacional, una multa de bastantes ceros seguidos de un entero. Hispanidad redaccion@hispanidad.com