Chapuza sobre chapuza. El real decreto del ajuste no fue terminado el pasado jueves sino el mismo lunes, fecha de su publicación del BOE. Pero ocurre que un día después, este martes, el BOE publica una corrección de erratas en la que se da marcha atrás al freno de la emisión de deuda. Por si acaso, muchos consistorios se reunieron en la noche del lunes de urgencia para aprobar la emisión de deuda que les permitiera sobrevivir un poco más.
Al final el Gobierno da marcha atrás. Y lo hace mediante una corrección de erratas. Lamentable. Chapucero. Pero ZP ha firmado su sentencia de muerte. Le ha comunicado al mercado dos cosas: una que es un chapucero, que se salta la legislación, el procedimiento y lo que haga falta. Y la segunda, más grave: que no tiene coraje para tomar medidas duras de ajuste del gasto. Y el dueño del protectorado necesita alguien con capacidad y coraje. Zapatero no es su hombre. Por supuesto la bolsa, acusa el golpe. Los bancos caen en picado.
Y por si fuera poco, Elena Salgado tiene la desfachatez de asegurar que no tiene la mayor importancia. ¿Cómo que no tiene importancia un recorte interruptus mediante una corrección de erratas? Los mercados no son tontos.
Andrés Velázquez
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