Como todos los miércoles, la sesión de control al Gobierno depara titulares y alguna frase más llamativa que otra. El enfrentamiento dialéctico que ha habido hoy ha tenido un invitado especial: el 23-F. Y es que el José Luis Rodríguez Zapatero no ha querido responder a las preguntas económicas de Mariano Rajoy alegando que era el aniversario del 23-F.
Con este ejemplo, ya saben todos los lectores: el día de su cumpleaños, aniversario de bodas o el mismo 23-F de 2012, no vayan a trabajar y que en recuerdo del 23-F, todo el mundo vaya a las puertas del Congreso y se paralice el país.
En estos casos es preferible decir que se está enfermo y no acudir a la sesión de control, Y es que además, en cada una de las sesiones, se repiten los argumentos, desde una y otra bancada. Los unos acusan a los populares de no aportar nada positivo y de utilizar la táctica de grandes proclamas y ninguna propuesta. Y los otros echan en cara a los socialistas, y especialmente al presidente del Gobierno, que son un lastre para la economía española, además de que los españoles no tienen confianza ni en su Gobierno, ni en sus políticas ni en usted.
De esta manera, avanza otro mes más sin que el país salga adelante, con datos de paro crecientes y con muy leves repuntes económicos. Mientras tanto, los representantes políticos, guardan un día de silencio, en recuerdo del 23-F.
Juan María Piñero
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