Universitarios por la Vida organizó este jueves una chupetada por la vida. El acto, al que se sumaron otras asociaciones, consistió en situarse frente al Ministerio de Igualdad para protestar contra la ministra Aído y su Ley del Aborto el mismo día que ésta recibía a las asociaciones provida, no para dialogar, sino para contarles lo que va a hacer. Previamente Aído ya se había preocupado de acusar a los provida de fundamentalistas religiosos.
Los universitarios concentrados frente al ministerio llevaban chupetes, que es el logo de la asociación, para recordarle a la ministra que lo que ocurre con el aborto es que se está matando a los niños. Un gesto fresco, colorido y original que indica que en la universidad todavía quedan rebeldía y buenas ideas.
Los desprecios hacia los provida continuaron después de la reunión. Bibiana Aído señaló tras el encuentro con Derecho a Vivir que había sido la única reunión totalmente estéril. La ministra criticó a esta asociación por acudir con posturas extremas y posiciones cerradas. Aído zanjó con su argumento implacable: este Gobierno, que está tan por la vida como ellos, no puede someter una cuestión como ésta a criterios religiosos o extremos como los que plantean.
Por su parte, Alicia de la Torre, que acudió al encuentro como representante de la Federación de Asociaciones Provida, declaró que la ministra había escuchado sus peticiones: respeto a la objeción de conciencia, medidas para facilitar la inserción laboral de la embarazada y nuevas estrategias de prevención de abortos. Sin embargo, de la Torre admitió que Aído no tendrá en cuenta sus propuestas.