Ofrecen 3.600 millones de euros por una compañía con 2.200 millones de euros en liquidez. Muchos consejeros empiezan a plantear lo ridículo del precio, aunque los directivos prefieren ser comprados por un fondo: más posibilidades de permanecer. La Oficina Económica de Moncloa plantea la necesidad de una ‘opción española', o sea Air Europa. José Hidalgo sigue meditando
Los movimientos corporativos no han cesado. Tanto Iberia como Altadis siguen siendo objeto de atención. Y desde luego el fondo de inversiones tejano TPG sigue estando interesado en hacerse con el botín. Eso sí, a bajo precio. La cosa se empezó a calentar el pasado jueves 16 cuando TPG anunció la compra junto a Northwest Airlines de Midwest Air Group por más de 400 millones de dólares: las acciones de Iberia se dispararon un 13% aunque finalmente cerraron con una subida del 2,43%. No esta mal si tenemos en cuenta que el Ibex cerró con pérdidas del 0,31%.
La compra en Estados Unidos parece ser una señal de la apuesta del fondo texano por el sector. Al menos esto es lo que interpretan analistas y mercados. Así que sigue en pie la oferta ‘no vinculante' de TPG y British Airways para hacerse con Iberia al precio de 3,60 euros por título. En la oferta también participarían otros socios como Ibersuizas, Quercus Equito y Visa Capital.
¿Por qué no vinculante? La explicación oficial es que actualmente están realizando una ‘due dilligence' que podría desembocar en una oferta vinculante. La oficiosa es que TPG y BA están aprovechando la actual crisis financiera para efectuar su compra a 3,60. Un precio ridículo porque supondría valorar la compañía en 3.600 millones de euros. Una miseria si tenemos en cuenta que actualmente Iberia cuenta con 2.200 millones de euros en liquidez.
En definitiva, texanos y británicos pretenden hacerse con la compañía por dos duros. El problema es que su capitalización es muy baja. Este lunes cotiza al alza situándose en los 3,17 por lo que 3,60 supondría una prima interesante. Además, TPG está ‘vendiendo' su gran experiencia en el mundo de las aerolíneas: está presente en America West, Continental Airlines y la compañía de bajo coste Ryanair, presidida por uno de los fundadores de TPG, David Bonderman.
Sin embargo, el director de la Oficina Económica de Moncloa, David Taguas, señaló la semana pasada que era partidario de una ‘opción española' para hacerse con la empresa. ¿Por qué resucitar el ‘patriotismo empresarial'? En primer lugar porque los británicos están teniendo un comportamiento muy ‘chovinista' con los aeropuertos adquiridos por Ferrovial. En segundo lugar, porque AENA se ha dejado el presupuesto en la T4 para que se la queda ahora un operador extranjero. Y en tercer lugar, British Airways tiene un problema grave con su fondo de pensiones. Un problema inexistente en el caso de Iberia. Dicho de otra manera: Iberia es una joya para que pase a manos extranjeras por cuatro perras chicas. Un comentario compartido por varios consejeros de la aerolínea de bandera.
Por otra parte, el comentario de Taguas tenía nombre y apellidos. Los Marsans estaban descartados: además de ser de derechas no han hecho sino generar problemas a la SEPI tras hacerse con Aerolíneas Argentinas. Sólo queda una opción: Air Europa. Una señora oportunidad para su presidente, José Hidalgo, conocido como ‘Pepe Aviones'. El problema es que financieramente no es tan fácil hacerse con Iberia, un monstruo muy superior a Air Europa. Así que aunque cuenta con la bendición del gobierno y empresarialmente sea un salto cualitativo, la exigencia financiera produce vértigo.
Y mientras Pepe Aviones medita, los especuladores mueven ficha. Por cierto, ¿saben quién es el presentante de TPG en España? Alfonso Cortina, todo un ‘patriota' empresarial como Manuel Pizarro. "Estamos hablando de cosas importantes como el dinero", respondía el presidente de Endesa cuando se le preguntaba sobre su patriotismo. Y un último apéndice: los directivos no dicen ni pío de la entrada de los ‘fondos buitres' de Texas. Al fin y al cabo se sobrevive mejor en el puesto con especuladores que quieran dar el pase que con empresarios que desembarquen con sus equipos.