Las medidas aprobadas el viernes suponen un coste de 7.600 millones

 

En la presentación de la propuesta de medidas llamadas de Zurbano, el Gobierno se comprometió a que no tendrían coste económico. Por aquello de las exigencias de Bruselas para el control del déficit. Sin embargo, finalmente, las medidas tienen coste. O al menos una menor recaudación. Veamos: 1.400 millones de euros por la rebaja del IVA de las chapuzas domésticas, 120 millones de euros por las deducciones del bono bus y 80 millones por el IVA reducido para los gastos de Dependencia siempre que sean conveniados con las CCAA.
A estos hay que sumar los 6.000 millones de euros del manguerazo del ICO. Y además, hay que sumar los 600 millones de euros por la libertad de amortización, aunque Salgado matiza que es diferimiento en los impuestos. Tan diferidos como los 8.000 millones de la Seguridad Social que nadie sabe si se van a recuperar. Añadan a este cóctel de austeridad los 17.000 millones del Plan de Infraestructuras. Para no afectar al gasto público no está nada mal