Sr. Director:
La reforma de la Ley de Divorcio, que aprobó el pasado viernes el Consejo de Ministros, constituye un nuevo atentado legal contra el matrimonio, contra la familia y contra los hijos.
PROFAM denuncia una vez más la persecución obsesiva, demagógica y antidemocrática del Gobierno socialista contra la familia, el matrimonio y los hijos, al reformar la ley de divorcio sin escuchar a los padres, a las asociaciones y a los expertos, que son los que conocen los problemas y las soluciones y pueden aportar su experiencia a los legisladores.
PROFAM recuerda al Gobierno, a la sociedad y a las familias, que la liberalización aprobada el viernes pasado confirmará una vez más el viejo eslogan: Divorcio engendra divorcio; y como consecuencia generará mayores sufrimientos y problemas para los separados, para sus familias y para los hijos, que son las víctimas indefensas de la situación.
PROFAM acusa al dialogante señor Zapatero del procedimiento que utiliza para legislar, ya que ni dialoga, ni escucha, ni consulta (lo que le conduce, en muchos casos, a tener que desdecirse de un día para otro), para enterarse de los efectos y consecuencias que una ley así tiene para todos, especialmente los hijos, que son los más perjudicados, sobre todo con la custodia compartida, que es el mayor disparate que puede plantear un legislador, y que revela no tener el nivel adecuado para hacerlo.
PROFAM hace notar que el señor Zapatero parece tener prisa en distraer la atención, para que los ciudadanos no piensen en los grandes problemas de España y en las contradicciones y manipulaciones que el Gobierno socialista está utilizando en su tarea de desgobierno, en perjuicio de todos los españoles, lo cual está generando cada vez más un clamor de rechazo y protesta. Se pone nuevamente de moda la frase conocida: Los socialistas sólo aciertan cuando rectifican. Esperemos que rectifiquen bien y no lo empeoren.
PROFAM advierte que con esta reforma legal sobre el divorcio se quiere reducir a un simple contrato sin ningún compromiso la más importante de las instituciones naturales y sociales, ignorando la adecuada concepción antropológica que requiere el matrimonio para el bien y el progreso de la sociedad. Eso sin entrar en otros proyectos legislativos que se preparan contra la familia sobre los que seguiremos hablando.
PROFAM afirma, una vez más, que el matrimonio no es el resultado de la cultura, de la historia ni de los dictados del poder, que es anterior al Estado y constituye la célula básica de la sociedad, por lo que los gobernantes no tienen capacidad ni legitimidad para añadir, quitar, modificar, coartar, equiparar ni cambiar la estructura, composición y fines que la ley natural ha dado al matrimonio.
PROFAM anima a las familias y a todos los ciudadanos a oponerse a esta reforma, inundando de cartas de protesta al Gobierno, los diarios y los medios de comunicación, y pide a los parlamentarios y diputados que se salten la disciplina de partido y voten en conciencia en contra de la reforma, que no sólo no resuelve nada, sino que agravará aún más la problemática de la vida matrimonial, con el grave impacto que esto tiene para la estabilidad social.
Acompañamos modelo de carta que pueden firmar todos los miembros de la familia, amigos y conocidos, o ciudadanos de cualquier clase o condición, y enviarlo a PROFAM, Apartado 47105 28080 Madrid, quien se encargará de enviarlas, con lo cual seguro que no se pierden, porque en muchos casos los receptores las tiran directamente a la papelera y dicen que no han recibido nada. Si necesita más ejemplares haga fotocopias y anime a todos los ciudadanos a protestar.
Madrid, septiembre de 2004
Sr. D. José Luis Rodríguez Zapatero
Presidente del Gobierno Español
Palacio de La Moncloa
28071 Madrid
REF.: REFORMA DE LA LEY DE DIVORCIO
Excmo. Sr.:
Ante el proyecto de reforma de la Ley de Divorcio que el Gobierno ha aprobado el pasado 17 de Abril de 2004, los abajo firmantes queremos manifestar nuestro rechazo y protesta, ya que constituye un nuevo atentado contra la familia y contra los hijos por las siguientes razones.
1.- En la reforma que se pretende hacer los hijos serán víctimas inocentes, sujetas a las volubles decisiones de los padres por la custodia compartida, lo que supone una inestabilidad y desorden formativo, educativo y afectivo que dañará su desarrollo normal.
2.- El divorcio no es un derecho de la persona. La regulación civil del divorcio es, a lo más, un supuesto remedio a un mal social, pero que introduce una permisividad que socava las bases más firmes de la sociedad y de la familia. Dar mayores facilidades es estropearlo más.
3.- El divorcio implica a su vez una grave amenaza contra la estabilidad del vínculo matrimonial, valor sumamente importante para la vida afectiva de los esposos, para el bien de los hijos, para la firmeza de la familia y, al mismo tiempo, un elemento integrante fundamental del bien común de la sociedad.
4.- El divorcio es un tipo de legislación prácticamente irreversible, que tiende progresivamente a la multiplicación en cadena de causas que declaran legalmente roto el compromiso matrimonial.
5.- El divorcio, al conceder la posibilidad legal de contraer nuevo matrimonio civil, puede incitar a matrimonios con crisis transitorias, a acudir a este recurso legal, por lo que, más que un remedio se transforma en una puerta abierta a la generalización de las rupturas matrimoniales.
6.- Es imprescindible establecer un procedimiento legal de conciliación obligatoria, en la que participen familias, asociaciones familiares y expertos, antes de decretar la ruptura, porque la experiencia demuestra que se consiguen arreglar casos cuya crisis parecía irreversible.
Creemos que las autoridades y los Gobiernos tienen obligación de asumir la valoración del matrimonio, que exige que se dé oportunidad a las asociaciones familiares y a los expertos para participar en cualquier reforma que se haga sobre esta materia.
Confiamos en que el Gobierno que usted preside atienda las peticiones que aquí recogemos, que cuenta con un amplio respaldo de madres, padres y educadores.
PROFAM
profam@wanadoo.es