El primero en reclamar una política económica por paquetes en lugar de goteo fue Rato el martes. Posteriormente, el vicepresidente del Santander, Rodríguez Inciarte, se suma. Necesitamos un fuego abrasador. Este vienes es el director general de La Caixa, Juan María Nin, quien reclama una presentación por paquetes de las medidas adoptadas para que los operadores de mercado, analistas y creadores de opinión tengan una visión completa.
Y es que Nin lamenta presentarse como portavoz de buenas noticias. A saber: mejora en el consumo energético del 4,9% en mayo, mantenimiento de la cuota de exportaciones junto a Alemania, tasa de ahorro aceptable, tasa de consumo repuntando, etc. Incluso en el tema inmobiliario se muestra optimista. Detrás de los activos de otros no hay nada; detrás de los nuestros hay piedras. Nin considera que seremos capaces de digerir ese stock en 7 años y que en todo caso, los 40.000 millones de suelo no valen cero ni son indigeribles.
