Aunque lo ha disfrazado sugiriendo que nacionalizará los "recursos naturales" del paísEl presidente de Bolivia, Evo Morales, se encuentra en la 42 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se celebra en la localidad boliviana de Cochambamba (centro). Allí ha dicho que su Gobierno podría emprender la nacionalización de "todos los recursos naturales". Así lo ha expresado: "Con respeto a todos los cancilleres y con respeto a todos los países observadores de la comunidad internacional, esta pequeña experiencia de trabajo de gestión de seis años y medio me obliga a recomendar y a sugerir a los países de América Latina, el Caribe y el mundo a recuperar sus recursos naturales para el bien de todos los pueblos".
Recordemos que el mismo Evo Morales expropió el mes pasado la empresa Transporte de Electricidad (TDE), filial de Red Eléctrica de España, y justificó la medida por la falta de inversiones de TDE en el desarrollo del Sistema Interconectado Nacional (SIN). Aunque hay muchos más ejemplos de expropiaciones en Bolivia durante los gobiernos de Morales.
Conviene aclarar un punto: los recursos naturales de un país -en este caso de Bolivia- son de ese país y, por lo tanto, no se pueden expropiar. Lo que se hace es dar concesiones a empresas para que los gestionen, exploten…
En Argentina, por ejemplo, cuando se actuó contra YPF no se expropió el petróleo (que es argentino), sino las acciones de una empresa que tenía la concesión de explotarlo, en ese caso, Repsol.
Por eso, cuando uno de estos gobernantes -tipo Morales- dice que expropiará los recursos naturales para que se queden en el país, lo que quiere decir es que va a expropiar la empresa que tiene la concesión de explotarlos.
Por tanto, que se vayan preparando el resto de empresarios españoles con inversiones en el país andino. Ya saben qué camino les espera en Bolivia, un país dominado por el indigenista de Evo Morales.
Por cierto, el 'indigenismo' que propugna don Evo en Bolivia es viejo. Según explica el profesor de la UNED Pedro Carlos González Cuevas, glosando a Ramiro de Maeztu, en el libro 'América y la Hispanidad' (Eunsa), el indigenismo es "tan solo una fábula izquierdista heredera del mito rousseauniano del buen salvaje, que intentaba desacreditar la verdadera tradición hispánica".
Y es que no hay nada nuevo bajo el sol.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
Recordemos que el mismo Evo Morales expropió el mes pasado la empresa Transporte de Electricidad (TDE), filial de Red Eléctrica de España, y justificó la medida por la falta de inversiones de TDE en el desarrollo del Sistema Interconectado Nacional (SIN). Aunque hay muchos más ejemplos de expropiaciones en Bolivia durante los gobiernos de Morales.
Conviene aclarar un punto: los recursos naturales de un país -en este caso de Bolivia- son de ese país y, por lo tanto, no se pueden expropiar. Lo que se hace es dar concesiones a empresas para que los gestionen, exploten…
En Argentina, por ejemplo, cuando se actuó contra YPF no se expropió el petróleo (que es argentino), sino las acciones de una empresa que tenía la concesión de explotarlo, en ese caso, Repsol.
Por eso, cuando uno de estos gobernantes -tipo Morales- dice que expropiará los recursos naturales para que se queden en el país, lo que quiere decir es que va a expropiar la empresa que tiene la concesión de explotarlos.
Por tanto, que se vayan preparando el resto de empresarios españoles con inversiones en el país andino. Ya saben qué camino les espera en Bolivia, un país dominado por el indigenista de Evo Morales.
Por cierto, el 'indigenismo' que propugna don Evo en Bolivia es viejo. Según explica el profesor de la UNED Pedro Carlos González Cuevas, glosando a Ramiro de Maeztu, en el libro 'América y la Hispanidad' (Eunsa), el indigenismo es "tan solo una fábula izquierdista heredera del mito rousseauniano del buen salvaje, que intentaba desacreditar la verdadera tradición hispánica".
Y es que no hay nada nuevo bajo el sol.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com