Lo contaba ayer Intereconomía. El sindicato Manos Limpias presentó este miércoles ante la Audiencia Nacional un escrito de denuncia contra el jefe de Seguridad del PSOE, el comandante Mariscal, en excedencia, y el jefe de la Brigada policial de San Sebastián, Manuel Risco. Según el secretario general de Manos limpias, Miguel Bernat, la historia presuntamente es la siguiente: el comandante Mariscal llama a Risco para que avise al extorsionador y recaudador del impuesto revolucionario, Imanol Elosúa de que el juez Grande Marlaska había remitido un oficio en su búsqueda y captura.
Risco cumple el cometido, pero no le encuentra en su domicilio, así que llama para pedir instrucciones. Le dicen que lo intente en el bar Faisán de Irún, propiedad de Elosúa. Efectivamente, Elosúa estaba ahí. Un policía que acompaña a Risco le dice al extorsionador que le llaman de Madrid, le pone el teléfono y es cuando le informan que Marlaska le persigue, que huya por la puerta trasera. Por supuesto, Elosúa emprende la huida.
La denuncia ha sido acumulada a otra presentada por el mismo sindicato contra el ex director de la Brigada de Información de la Policía, Telesforo Rubio por el mismo chivatazo. Bernat le pide al juez garzón que investigue esas acusaciones y se encuentra actualmente a la espera de la aceptación o no a trámite. No obstante, este jueves o quizás este viernes se personará con abogado y procurador para darle mayor fuerza a la demanda. El acusador espera que Garzón agilice los trámites y no lo deje dormir. Pero de ser cierto, resultaría gravísimo, como apunta Bernat que haya sido el mismo PSOE quien haya dado el soplo al extorsionador para salvaguardar el mal llamado proceso de paz.