No hay nada como que se acerquen las elecciones para que el Gobierno de turno toque las pensiones. Se trata de un colectivo de ocho millones de personas, todas con derecho a voto y con capacidad para volcar gobiernos. Así que todos los gobiernos de la democracia han prestado una especial atención a quien les podía sacar de la Moncloa. Se les aseguró por ley su poder adquisitivo, recibiendo en enero una paga extra si la inflación real era superior a la prevista.
Pues bien, por si acaso el Gobierno decide adelantar las elecciones, ya empieza el sorteo del gordo. A los tres millones de pensionistas que se encuentran con las pensiones mínimas, el gobierno ha aprobado una subida de entre el 5,6 y el 7,1%. Muy por encima de la inflación, señala De la Vega. En el conjunto de los 8 millones de pensionistas, la subida aprobada se sitúa en el 2,6%, es decir, exactamente en el IPC
