Tres responsables de una película fueron detenidas recientemente en Mumbay, después de varios días de protestas encabezadas por asociaciones a favor de la libertad religiosa.
Los detenidos son el director, el productor y el publicista de una película contra la libertad religiosa en la India. Se les acusa de "herir los sentimientos religiosos",
"mala intención", "insultar las creencias religiosas", así como la violación de las reglas cinematográficas.
Con razón decimos tantas veces que la "cultura" occidental está bajo mínimos. En España y en otros países de raíces cristianas se organizan orgías teatrales o cinematográficas con un fondo -y una superficie- blasfemo, y pagado en todo o en parte por administraciones públicas, y casi nunca pasa nada. En alguna ocasión la presión social consigue retirar el "espectáculo", o la subvención, o la declaración del político de turno aduciendo ignorancia, lo que tampoco le libera de su culpabilidad.
Es clara la diferente sensibilidad hacia lo religioso que tienen los dirigentes hindúes y los "cultos" europeos.
Amparo Tos Boix