En Periodismo se suele repetir, irónicamente, una máxima: "No dejes que la verdad estropee una buena historia". Pues bien, los responsables de La Gran Estafa la han tomado como lema para narrar unos hechos que aunque parezcan increíbles están basados en la realidad.

En el año 1971, un escritor sin éxito, Clifford Irving, ideó una mentira que figura en los anales del periodismo americano. Ansioso de fama y fortuna convenció a la editorial McGraw-Hill y a la todopoderosa revista Life de que había conseguido la exclusiva para escribir la autobiografía del extraño millonario Howard Hughes. Sólo había una pequeña pega: este desconocido escritor nunca había tenido ningún contacto ni postal ni físico con el misterioso Hughes. El pícaro Clifford confiaba en sacar adelante su montaje debido a que el millonario llevaba diez años de mutismo total debido a su fobia a hablar en público. Pero lo que comenzó como una simple patraña, en la que ayudaron a Clifford su mejor amigo y su esposa, acabó transformándose en un gran escándalo que salpicó incluso a la Casa Blanca.

El argumento de La Gran Estafa guarda similitudes con la magnífica Atrápame si puedes, dirigida por Steven Spielberg, porque en ambas los protagonistas son dos grandes mentirosos y, en el fondo, unos desgraciados.

El director Lasse Hallström (con títulos en su haber tan polémicos como Las Normas de la casa de la sidra) ha construido una historia de contenido muy americano pero que, sin embargo, atrapa al espectador europeo actual debido a la estupenda descripción psicológica en la que vemos inmersos a los personajes principales. Bien interpretada, al final cualquier buen aficionado al cine se sentirá seducido por este relato a pesar de pillarle tan lejos la figura de Hughes como los manejos del entonces presidente de EEUU: Richard Nixon.

La Gran Estafa se estrenará en salas comerciales el día 28 de septiembre

Para: Los que les gusten las historias de pillos.