Sr. Director:

Lo que no se entiende es cómo algunas grandes Compañías estratégicas de la UE estén controladas, dirigidas y dominadas por los Estados o los Gobiernos de turno, como EDF, ENEL y E.ON y puedan a su vez comprar las Compañías de otros países de la misma UE controlando los sectores estratégicos de éstos.

Si se desea mantener ese control, lo cual puede ser lógico y lícito, ¿no debería estarles vedada esa posibilidad de compra, para evitar su injerencia en la estrategia de otros países de la Unión? Porque por este sistema se consumará la antigua dominación europea de unos países sobre otros, que tantas guerras ha provocado. Por último, ¿no es esta posibilidad contraria al espíritu de la UE?

Humberto Ramírez

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