Mientras Zapatero acusaba al PP de llenar la vida pública de chapapote, el petrolero New Flame se hundía en las costas de Gibraltar
En agosto, cuando la campaña electoral no había alcanzado su máximo apogeo, el chatarrero New Flame embarrancó en las costas de Gibraltar. Ahora que el barco se ha hundido, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, anuncia la llamada a consultas de la embajadora del Reino Unido, Denise Holt.
El barco se hundía este domingo mientras Zapatero recordaba en su mitin en Vistalegre: "No me callo ante quien quiere llenar de chapapote la vida pública con insultos y descalificaciones". Como dice Narbona, el chatarrero no lleva mercancías peligrosas y los restos de fuel que llegan a las costas españolas lo hacen en "cantidades poco significativas". La ministra de Medio Ambiente prefiere que sea Peter Caruana, primer ministro de Gibraltar, quien dé las explicaciones sobre el accidente. Quienes sufren las consecuencias son los andaluces. Las dos manchas de hidrocarburos procedentes del chatarrero han llegado ya a la Bahía de Algeciras. Una desde el Rinconcillo hasta la playa de La Concha y otra desde el río Pícaro, en la playa de Getares, hasta el Puerto de Algeciras.
No es la primera vez que se hunde un barco durante la legislatura Zapatero. El petrolero Don Pedro se hundió el pasado verano a una milla náutica de las costas de Ibiza. La diferencia es que el accidente no provocó la reacción de los ‘nunca mais' reconvertidos hoy en Plataforma de Apoyo a ZP (^PAZ^,), aceptaron la explicación de las "pequeñas fugas" que no sirvió para el Prestige.
