También, que los padres puedan educar a sus hijos en castellano en cualquier lugar de EspañaLa Confederación Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos (CONCAPA) ha felicitado este martes al ministro de Educación, José Ignacio Wert, por las últimas propuestas planteadas al anteproyecto de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), particularmente en dos de las demandas realizadas por CONCAPA desde hace tiempo: la supresión de la Educación para la Ciudadanía y la alternativa a la clase de Religión.
Para CONCAPA, la necesidad de suprimir la Educación para la Ciudadanía (Educación Cívica y Constitucional), una asignatura de carácter ideológico que restaba tiempo y esfuerzo a las materias troncales, ha sido una reivindicación desde la aprobación de la misma. Igualmente, no se entiende que no se planteara una alternativa a la asignatura de Religión para aquellos alumnos que no cursaran la asignatura, y que ahora tendrán la posibilidad de hacerlo (Valores Culturales y Sociales, y Valores Éticos).
Otra de las demandas realizadas por CONCAPA era la necesidad de plantear una memoria económica para llevar a cabo la reforma, lo que, al parecer, ya ha confirmado el Ministerio. "Esperemos que la dotación sea suficiente para desarrollar la Ley", se afirma desde la Confederación.
Igualmente, CONCAPA considera "una gran noticia" defender el derecho de los padres a educar a sus hijos en castellano en cualquier lugar de España si así lo desean, prefiriendo que se lleve a cabo en el centro donde están escolarizados, siendo los gastos generados por cuenta y cargo de la administración autonómica correspondiente. "Es preciso garantizar el derecho de los padres y alumnos a escoger si desean estudiar en castellano o en la lengua cooficial (que pasa a denominarse "de especialidad") o en ambas, sin ver por ello mermadas sus posibilidades de conseguir el título de ESO o de Bachillerato", subraya la entidad.
"Valoramos también aspectos como que la mitad del contenido y horarios de las materias troncales los fije el Estado, mientras que los contenidos de las específicas y de especialidad son fijados por las CCAA; ésta es la única forma de salvaguardar la movilidad de familias y profesores entre las diferentes CCAA y de evitar las grandes diferencias de nivel entre las mismas, apoyándose en la Alta Inspección del Estado y en las evaluaciones objetivas y externas", añade la asociación.
Finalmente, concluye CONCAPA, "apoyamos aspectos como las pruebas objetivas y externas (que quedan fijadas en 4º de ESO y 2º de Bachillerato) y la necesidad de que el alumno de FP pueda obtener el título de ESO".
Sin embargo, CONCAPA pide al Gobierno "un mayor apoyo al asociacionismo familiar, para que los padres se impliquen más en la educación de sus hijos, colaborando con el centro, y acometa también un cambio profundo en las etapas de infantil y primaria, que redunde en un mayor aprovechamiento y formación de los alumnos".
José Ángel Gutiérrez
joswangel@hispanidad.com
Para CONCAPA, la necesidad de suprimir la Educación para la Ciudadanía (Educación Cívica y Constitucional), una asignatura de carácter ideológico que restaba tiempo y esfuerzo a las materias troncales, ha sido una reivindicación desde la aprobación de la misma. Igualmente, no se entiende que no se planteara una alternativa a la asignatura de Religión para aquellos alumnos que no cursaran la asignatura, y que ahora tendrán la posibilidad de hacerlo (Valores Culturales y Sociales, y Valores Éticos).
Otra de las demandas realizadas por CONCAPA era la necesidad de plantear una memoria económica para llevar a cabo la reforma, lo que, al parecer, ya ha confirmado el Ministerio. "Esperemos que la dotación sea suficiente para desarrollar la Ley", se afirma desde la Confederación.
Igualmente, CONCAPA considera "una gran noticia" defender el derecho de los padres a educar a sus hijos en castellano en cualquier lugar de España si así lo desean, prefiriendo que se lleve a cabo en el centro donde están escolarizados, siendo los gastos generados por cuenta y cargo de la administración autonómica correspondiente. "Es preciso garantizar el derecho de los padres y alumnos a escoger si desean estudiar en castellano o en la lengua cooficial (que pasa a denominarse "de especialidad") o en ambas, sin ver por ello mermadas sus posibilidades de conseguir el título de ESO o de Bachillerato", subraya la entidad.
"Valoramos también aspectos como que la mitad del contenido y horarios de las materias troncales los fije el Estado, mientras que los contenidos de las específicas y de especialidad son fijados por las CCAA; ésta es la única forma de salvaguardar la movilidad de familias y profesores entre las diferentes CCAA y de evitar las grandes diferencias de nivel entre las mismas, apoyándose en la Alta Inspección del Estado y en las evaluaciones objetivas y externas", añade la asociación.
Finalmente, concluye CONCAPA, "apoyamos aspectos como las pruebas objetivas y externas (que quedan fijadas en 4º de ESO y 2º de Bachillerato) y la necesidad de que el alumno de FP pueda obtener el título de ESO".
Sin embargo, CONCAPA pide al Gobierno "un mayor apoyo al asociacionismo familiar, para que los padres se impliquen más en la educación de sus hijos, colaborando con el centro, y acometa también un cambio profundo en las etapas de infantil y primaria, que redunde en un mayor aprovechamiento y formación de los alumnos".
José Ángel Gutiérrez
joswangel@hispanidad.com
