Tony Blair comenzó su intervención en la Cámara de los Comunes, en la mañana del miércoles 3, felicitando por su triunfo electoral al presidente afgano Hamid Karzai. Venía a cuento porque la invasión de Afganistán fue la primera guerra de Bush tras el 11-S, en ningún caso discutida y contra un Régimen talibán mucho más cercano a Ben Laden que el de Sadam Husein.