Sr. Director:
Patético resulta el orgullo que muestran algunos por el hecho de que sea una valenciana la elegida para representar en Iberoamérica al emporio pornográfico Playboy. Porque, incluyendo a esos que opinan que se trata de un "mal menor y necesario", estamos todos de acuerdo en que la pornografía explota y denigra a la mujer.
Hasta la misma protagonista debe de tener sus problemas de conciencia, cuando en todas sus declaraciones públicas dice que se dedica "al mundo de la moda". Será de la moda dérmica.
Alberto Asensi Vendrell
albasen@ono.com