En el tercer debate, los candidatos Obama y Romney coincidieron en salir de allíNo están bien las cosas en Afganistán. A los frecuentes ataques de los talibanes contra las tropas extranjeras que se hallan en su territorio, se une el fanatismo, que es tan peligroso. De hecho, lo último ha sido un atentado suicida a las puertas de una mezquita durante la fiesta islámica del sacrificio en el noroeste afgano, que ha causado en torno a 40 muertos y medio centenar de heridos, informan agencias.

Afganistán se ha convertido en un problema de política exterior para EEUU. George Bush entró allí el 7 de octubre de 2001, un mes después de los atentados del 11 de septiembre, con la 'Operación Libertad Duradera' para combatir el terrorismo yihadista, encontrar a Osama bin Laden y otros dirigentes de Al Qaeda para llevarlos a juicio, y derrocar al régimen Talibán que apoyaba y daba refugio y cobertura a los miembros de Al Qaeda.

Once años después, puede decirse que EEUU ha fracasado en ese empeño pues los talibanes siguen ahí. Según algunos analistas, después de este fracaso, los gobernantes de Estados Unidos y Europa quieren tener una explicación para sus propias sociedades y decir que si bien no pudieron ganar la guerra ni crear el Estado, al menos están dejando en pie una fuerza nacional afgana que proseguirá esos trabajos.

Por eso, en el tercer debate de cara a las presidenciales del próximo 6 de noviembre, los candidatos Obama y Romney coincidieron en salir de Afganistán.

El candidato presidencial republicano, Mitt Romney, afirmó que si es elegido presidente, las tropas de EEUU en Afganistán "volverán a casa" en 2014. Por su parte, Obama dijo que mantiene su promesa de aumento de tropas en Afganistán, pero que ahora la parte estadounidense está en posición "de transición" hacia la retirada a fines de 2014. Según los planes de Obama, las tropas del país norteamericano traspasarán el mando de la seguridad a Afganistán en 2014.

Romney también pidió un cambio de estrategia en la lucha "contra el extremismo radical", que supone un peligro para EEUU. Obama recordó que su estrategia se basa en "mantener a salvo al pueblo estadounidense", para lo que, dijo, acabó con la guerra de Iraq, diezmó a los líderes de Al Qaeda y encauzó la transición en Afganistán.

La guerra en Afganistán está siendo una sangría en hombres y en dinero para EEUU. Y atentados como el de este viernes no contribuyen a dar la imagen de que los estadounidenses hayan encauzado nada. Por eso, en principio, tal fracaso en política exterior de Obama podría beneficiar a Romney, que lo ha visto claro y ha dicho eso de que las tropas de EEUU en Afganistán "volverán a casa" en 2014.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com