• Las dificultades financieras personales de Florentino y los Albertos repercuten en la empresa.
  • Alcocer y Cortina han tenido que aportar nuevas garantías personales para renovar un crédito de 300 millones de euros con tres entidades, comandas por el Santander.
  • Por su parte, los March se enfrentan directamente a Florentino: no pueden vender su participación y no les gusta la gestión del presidente, especialmente en Iberdrola.

Los tres socios de la constructora ACS están cada día más divididos y más enfrentados. Encima, las dificultades de las financieras de Florentino Pérez y de los Albertos (en la imagen) añaden leña al fuego.

Alcocer y Cortina acaban de refinanciar un vencimiento -tres entidades, capitaneadas por el Santander- de 300 millones de euros. Los prestamistas han exigido nuevas garantías y los Albertos han tenido que recurrir a su patrimonio personal para refinanciar una deuda creciente. Siguen teniendo un 13% del capital, pero su financiación resulta cada vez más pesada de digerir.

Por su parte, los March, pocos amigos de batallas, se han enfrentado directamente a Florentino (11% del accionariado). No pueden reducir su participación de casi el 15%, dada la cotización de los títulos, y encima Florentino se empeña en mantener la pugna con Iberdrola, cuando se había acordado renunciar a los derivados y preparar la venta de lo que da en títulos directos a la menor oportunidad.

Lo malo es que las cuitas financieras y los desacuerdos entre los tres socios están afectando a la gestión. Por ahora nadie puede irse pero los March lo están deseando.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com