Tras convertirse en la primera figura del mundo del boxeo, Adonis Creed ha abandonado el ring pero ha puesto en marcha un negocio donde se preparan futuros boxeadores. No obstante cuando, tras cumplir una larga condena en prisión, reaparece en escena Damian, un amigo de la infancia y antiguo prodigio del boxeo, Adonis cree que merece una oportunidad en el ring. El enfrentamiento entre estos antiguos amigos es algo más que una simple pelea.

Con la misma estructura narrativa que las dos anteriores entregas de esta famosa franquicia pugilística llega Creed III, que en esta ocasión cuenta como director con Michael B. Jordan quien también vuelve a encarnar el papel protagonista.

“Si funciona no lo cambies”, por ello los responsables  de esta saga, que tuvo su origen hace casi 50 años con Rocky, repiten los parámetros argumentales que han surtido efecto en toda la trayectoria de este tipo de películas o, lo que es lo mismo, mezclar la trama deportiva con la humana. Pero se aprecia cierto desgaste en estirar “la goma” porque toda la parte personal y humana de la película es previsible y demasiado sentimentaloide, mientras se constata en imágenes el giro que en la sociedad ha dado el mundo del boxeo que ha pasado de ser, en las primeras películas de Rocky un hecho deportivo, a convertirse en un espectáculo vistoso. Un ejemplo: en esta entrega los participantes tienen presentaciones de sus figuras algo “horteras”, más cercanas a las de la lucha libre americana, aunque no se puede quitar mérito a cómo están montados esos combates, ahora mucho más violentos. Eso sí, como en las películas clásicas de Rocky, en Creed III hay un claro mensaje a favor de la conciliación y el perdón.

Michael B. Jordan dirige la película a partir de un guión de Keenan Coogler, que fue el director de la primera entrega de Creed, y Zach Baylin (El método Williams).

En el reparto repiten Tessa Thompson y Phylicia Rashad, encarnando a las dos mujeres más importantes en la vida de Adonis junto a la debutante Mila Kent, encarnando a su pequeña hija.

Para: los que les gustaron las anteriores entregas de Creed y las historias del mundo del boxeo en general.