• Los yihadistas reciben ahora por todas partes: en Irak y en Siria.
  • Por eso, recurren al terrorismo: 43 muertos en un ataque a un hospital en Siria.
  • La mayoría de los fallecidos eran pacientes y familiares que estaban de visita.
Rusia y Estados Unidos han acordado dar un paso más en su colaboración militar en el conflicto sirio y, si hasta el momento se limitaban al intercambio de información, a partir de ahora coordinarán sus bombardeos en la lucha antiterrorista en Siria, tal como ha avanzado el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, aunque todavía quedan detalles por cerrar, informan agencias. Rusia, según el titular de la diplomacia rusa, está dispuesto a coordinar con Washington una operación militar conjunta para liberar la ciudad siria de Raqqa, la principal ciudad controlada por el grupo yihadista terrorista Estado Islámico en el país árabe. "Raqqa es uno de los objetivos de la operación antiterrorista, al igual que Mosul en Irak. Estamos seguros de que podrían liberarse de forma más rápida y efectiva si nuestros militares [de Rusia y Estados Unidos] coordinan con mayor antelación sus acciones. Ahora hay una posibilidad de que se de esa coordinación", ha apuntado Lavrov. Y es que el Estado Islámico (EI) se enfrentaba el martes a un doble ataque terrestre y aéreo contra sus feudos en Irak y Siria, con un respaldo masivo de la coalición internacional que encabeza Estados Unidos. En Irak, las tropas federales llevaban a cabo esas operaciones. Y en Siria, la coalición árabe-kurda de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) comandaba la iniciativa. Ante ello, los terroristas recurren a la cobarde táctica del terrorismo y de "utilizar a los civiles como escudos. Se ven en los mismos edificios de la ciudad", según aseveró Abdel Aziz al-Hamza, quien es cofundador del grupo Raqqa is Being Slaughtered Silently. De hecho, cuarenta y tres personas fallecieron en un ataque suicida a un hospital de la ciudad costera siria de Jableh, explicó la Organización Mundial de la Salud (OMS) ayer martes, informó AP. La mayoría de los fallecidos eran pacientes y familiares que estaban de visita, aunque también perdieron la vida tres médicos y enfermeras, explicó la OMS agregando que el centro ya no está operativo. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com