- Y mientras, mantiene una deuda más que elevada: 4.905,9 millones (3,3 veces el Ebitda), aunque es un 9,3% inferior a la del año anterior.
- El presidente, Folgado, no quiere perjudicar las cuentas: se baja el sueldo un 5%, hasta los 707.000 euros.
- La compañía gana 606 millones (-15,6%) por falta de extraordinarios. En 2014, tuvo indemnizaciones tras la expropiación de la filial boliviana TDE.
- Pero retribuirá a los accionistas con 3,21 euros por acción y quiere aumentar el dividendo un 7% anual hasta 2019.
- Por su parte, la facturación asciende a 1.939 millones ( 5%).
Este jueves repleto de resultados empresariales,
Red Eléctrica ha presentado los suyos. A la vista de las cifras, los que estarán más contentos serán los accionistas, ya que el
dividendo se ha disparado un 7%, mientras ha bajado el
beneficio y la
deuda es elevada. ¿Seguro que ha sido buena idea tener tanta generosidad con los accionistas? El tiempo lo dirá.
Pero algunos parece que han tomado medidas. El presidente de la compañía,
José Folgado (
en la imagen junto al Ceo, Juan Francisco Lasala), parece que no quiere perjudicar las cuentas, pues se ha bajado el sueldo un 5%, pasando de 746.000 euros a 707.000. Así, lo refleja el
informe de las remuneraciones remitido a la CNMV.
En total, REE ha destinado 2,653 millones de euros a retribuir a los miembros de su consejo, un 25,5% más que hace un año, cuando la cifra fue de 2,114 millones. Y entre el 57,3% de los votos emitidos, destaca que no ha habido votos negativos, pero sí un elevado número de abstenciones (35,47%).
El otro consejero ejecutivo de la eléctrica, el Ceo,
Juan Francisco Lasala, ha cobrado 244.000 euros como su primer sueldo, tras su incorporación el pasado mes de julio. En dicha fecha, el ejecutivo
fue recibido con unos resultados semestrales mejores de lo esperado, pero ahora el escenario es algo distinto.
Entre el resto de consejeros, la más afortunada es la independiente
Carmen Gómez de Barreda, cuya remuneración se mantuvo en los 190.000 euros. En el otro extremo de la tabla, encontramos al consejero dominical José Ángel Partearroyo, en representación de la
SEPI, con una cuantía de 5.000 euros que van a la empresa pública, aunque la cifra es bastante inferior a la del año anterior (64.000 euros).
Volvamos a los resultados. La compañía ha ganado 606 millones (-15,6%) por falta de extraordinarios. Y es que en 2014, tuvo indemnizaciones tras la expropiación de la filial boliviana
TDE, por valor de 158 millones. Si se hubieran descontado estos beneficios no recurrentes, el beneficio neto habría sido un 8,3% superior al del año anterior.
Sin embargo, REE retribuirá a los accionistas bastante bien. En concreto, les abonará 3,21 euros por acción y quiere aumentar el
dividendo un 7% anual hasta el año 2019, para cumplir con uno de los objetivos marcado en su estrategia 2014-2019.
La
deuda ha bajado un 9,3%, hasta los 4.905,9 millones, pero sigue siendo elevada. ¡Ojo! es de 3,3 veces el Ebitda, que fue de 1.458 euros ( 5,3%). Por su parte, la facturación ha ascendido un 5%, hasta los 1.939 millones ( 5%).
Y cómo no salió el tema político. En una conferencia con analistas, el Ceo ha señalado que no cree que un cambio de signo político en el Gobierno pueda "revolucionar" el sistema eléctrico. Algo similar a lo que comentó el presidente de Enagás, Antonio Llardén, la semana pasada, cuando consideró
imposible que haya cambios en la actual regulación energética.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com