• La rápida intervención policial impidió la matanza tras un un supuesto mensaje de WhatsApp que ofendía al islam.
  • La presión es constante contra los cuatro millones de cristianos: en el último mes, al menos cuatro han sido acusados por supuesta blasfemia en Punjab.
  • La ley de blasfemia se usa con frecuencia e injustamente para resolver venganzas personales.
Un tribunal anti-terrorismo (ATC) en Gujranwala, Pakistán, ha condenado a muerte a los cristianos Anjum Naz Sindhu, presidente de una escuela, y Javed Naz por supuestos cargos de blasfemia, informa Fides. En el último mes, al menos, cuatro cristianos han sido acusados por supuesta blasfemia contra el islam en la provincia del Punjab. En Sindh, en el sur de Pakistán, un hombre ha sido asesinado y otro ha resultado gravemente herido como consecuencia de los disturbios registrados entre hindúes y musulmanes en la localidad de Mirpur Mathelo. Este episodio también ha sido provocado por una acusación falsa de blasfemia contra un hindú, que según la policía era discapacitado mental. James Nadeem se cuenta también entre los cristianos que han sido injustamente acusados. En su caso fue por un mensaje de WhatsApp que supuestamente ofendía al islam. Al extenderse la noticia del supuesto insulto al islam, cientos de musulmanes se concentraron en las afueras del barrio cristiano con la intención de prender fuego a toda la zona y sólo una rápida intervención de la policía impidió la matanza, mientras que los cristianos dejaron sus hogares como medida de precaución. El cristiano Usman Masih también fue acusado de blasfemia porque presuntamente había enviado un mensaje ofensivo en la red social Facebook. En Pakistán viven unos 4 millones de cristianos, 200 millones de musulmanes y otros tantos de hindúes. Entre los países de mayoría musulmana, este es el que tiene una de las leyes más duras contra la blasfemia, que incluye una gran gama de acciones o comentarios que pueden ser interpretados como "difamación del islam". La ley introducida en 1986 por el dictador Mohammad Zia-ul-Haq sin ninguna aprobación parlamentaria prevé la cadena perpetua o la pena de muerte, pero con frecuencia se abusa de ella y se usa para resolver venganzas personales. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com