El senador de Compromís Carles Mulet ha presentado dos preguntas escritas al Gobierno sobre la asistencia católica en los centros sanitarios en las que argumenta que su presencia va en contra de la “aconfesionalidad del Estado consagrada en la Constitución”, informa La Razón.

El senador quiere saber cuánto dinero público se ha gastado desde que en 1986 se firmó un acuerdo de asistencia religiosa con el Instituto Nacional de Salud y que ha permitido hasta ahora la atención a aquellos que profesan esta religión pero “no al resto de confesiones o sectas religiosas”, e insiste en que “la asistencia religiosa no forma parte de ninguna rama de la medicina moderna”, añade este medio.

El Artículo 16 de la Constitución establece que los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española

El senador aclara que su intención no es extender esta asistencia al resto de religiones, sino evitar “que cualquier religión se inmiscuya en los centros sanitarios”, explica La Razón.

Pero Mulet se olvida del Artículo 16 de la Constitución Española, que establece, por ejemplo, que “los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones”.

Por lo demás, recuerda La Razón, Carles Mulet es un senador valenciano que se ha caracterizado por sus preguntas al Gobierno, ya fueran críticas o, en algunas ocasiones, incluso absurdas. Él fue precisamente el protagonista de inquirir por los protocolos del Ejecutivo central “ante un apocalipsis zombi”. Menos mediática pero igual de sarcástica fue su pregunta cuando, tras la llegada de los barcos que trasladaron a los guardias civiles a Cataluña en el referéndum del 1 de octubre, preguntó si “habían pedido permiso para usar su imagen a Piolín, El Pato Lucas o El Coyote” o “si los policías habían comunicado al Gobierno que habían visto un lindo gatito por los pasillos”.