Pablo Isla ha participado en la Cumbre empresarial organizada por la CEOE, que preside Antonio Garamendi
Pablo Isla, presidente de Inditex, ha pedido “no revertir las reformas eficaces” y “no desmontar o que está funcionando”. Son algunas de las diez reflexiones que ha hecho en la Cumbre empresarial de la CEOE ‘Empresas españolas liderando el futuro’ para afrontar la nueva crisis que vivimos, donde también ha destacado que no se retiren antes de tiempo medidas que están ayudando a no destruir tejido industrial, como los ERTE y los avales públicos, porque reconstruirlo es muy difícil y tiene un impacto significativo en el empleo.
El presidente del líder mundial del textil ha referido que estamos ante “una crisis de una magnitud enorme”, pero España la afronta en una situación peor que otros países de nuestro entorno (déficit público, desempleo, peso mayor en la economía de sectores que se van a ver más afectados). “No hay soluciones mágicas ni fáciles”, ha señalado Isla, que considera que exigirá “disciplina, rigor, madurez, comportamiento de muchísima responsabilidad por parte del Gobierno, de los partidos políticos, los sindicatos, las empresas y los ciudadanos”. Y se deben “buscar consensos lo más amplios posibles”.
Subraya que España afronta esta crisis en una situación peor que otros países de nuestro entorno
Isla ha insistido en la importancia de “generar certidumbre y seguridad jurídica a empresas e inversores nacionales e internacionales”, porque “cuando no hay seguridad jurídica, la inversión se retrae, y la inversión es clave para generar empleo”. Por ello, ha insistido en que se debe “huir de dogmatismos y de ideas preconcebidas”, y “no desmontar lo que está funcionando”, así como “no revertir las reformas eficaces”. Considera que la economía necesita ser más flexible y no debe introducir rigideces que sean negativas para la creación de empleo”, así como debatir sobre cómo generar más crecimiento económico y en consecuencia, mayor recaudación, “mucho más que subidas de tipos impositivos”. Además, ha señalado que “es importante usar las ayudas europeas de reconstrucción para hacer la economía más competitiva” y también cree que se debe afrontar el problema de tamaño de las empresas, que deben ser mayores, y acelerar su internacionalización.