- Gonzalo Gortázar no descarta más operaciones, pero Caixabank está demasiado ocupado en Portugal con BPI.
- Guardiola sostiene que el Sabadell tiene el tamaño adecuado para crecer en lo que quiere crecer.
- BBVA (Sáenz de Tejada) a lo suyo: la digitalización.
- Y eso que Guindos ha animado al juego con movimientos sobre Unicaja, Liberbank e Ibercaja.
- Javier Alonso, subgobernador del Banco de España, aboga por las fusiones pero transfronterizas.
Por un lado,
Danièle Nouy, pide
fusiones bancarias -todo banco en crisis debe ser liquidado o absorbido, ha dicho- y por otro los bancos españoles que tienen en sus manos esa opción,
Caixabank,
Sabadell y
BBVA, despejan a córner. O sea, reconocen que sí, que hay espacio para nuevas operaciones y una mayor
consolidación bancaria, pero se desmarcan de cualquier paso concreto en ese sentido.
Y eso, cómo no, también ha dado de sí en el VIII Encuentro Financiero organizado por
Expansión y
KPMG, en lo que parece una contestación de los tres principales contendientes -el
Santander está fuera de las quinielas tras la compra por un euros del
Popular- a la presidenta del Mecanismo Único de Supervisión del
BCE, que ha certificado que
el Popular fue el conejillo de indias para las crisis bancarias (en otras palabras, no que no puede volver a ocurrir).
Pero hay que tener en cuenta, en este contexto, que
los tres grandes -Caixabank, Sabadell y BBVA- están en las quinielas para asaltar la
banca mediana, una vez que
Guindos abrió la veda con su insólita propuesta al sector de una fusión de
Unicaja,
Liberbank e
Ibercaja, algo a lo que
banca se negó en rotundo. Es, por tanto, Guindos el que presiona, del mismo modo que los reguladores.
El subgobernador del Banco de España, Javier Alonso, por cierto, también ha echado valores fuera al abogar por las fusiones transfronterizas, aunque por las mismas razones que son planteadas en España: estrechamientos de márgenes, eficiencia, exigencias en recursos propios.
Pero no cunde el entusiasmo. Eso es claro también.
Gonzalo Gortázar, Ceo de
CaixaBank, se ha quitado de en medio desde el convencimiento de que tiene "una oportunidad de
crecimiento orgánico extraordinaria" y está demasiado ocupado en la integración en Portugal con BPI.
Ahora, bien, no duda, en paralelo, que puede haber más
operaciones en España, entre otras cosas porque en nuestro país hay
13 bancos bajo supervisión del BCE, mientras que en
Italia y
Francia -con más población que España-, hay 12.
Curioso también: ha dicho que "no se trata de ser el banco más grande, sino aspirar a ser el que da más servicio a los clientes".
En línea parecida,
Jaime Guardiola, Ceo del
Sabadell, se ha desmarcado del susto o muerte planteado por Nouy para los bancos en crisis, porque el tamaño del Sabadell es el "adecuado" para
crecer orgánicamente en lo que quiere crecer: acceso a los mercados y escala suficiente para invertir.
A diferencia de Gortázar, que sí ve espacio para una mayor
consolidación bancaria, Guardiola cree que ese proceso ha acabado en términos de resolver problemas de
solvencia. El recorrido pendiente, tras la resolución del Popular y la fusión
Bankia-BMN, dependerá, según Guardiola, de "ganar escala para reducir costes".
La intervención de
BBVA ha corrido a cargo de su director financiero,
Jaime Sáenz de Tejada, que ha insistido, para no variar, en la
digitalización. Ha adelantado, en ese sentido, que el banco pondrá toda su oferta de productos en el móvil a finales de año y que sus clientes digitales ya suponen un 40% sobre el total del grupo.
Rafael Esparza