Las autoridades sanitarias han ordenado el exterminio de una granja de 92.700 visones entre la que ha proliferado un brote de coronavirus en el que ha habido infectados tanto trabajadores como animales. Se ha detectado una transmisión masiva entre los visones, tan alta que ha decidido a las autoridades a sacrificar a todos ellos. ¿No les recuerda al caso de Excalibur? Pero aquí los defensores de los animales callan, no como en el caso del perro, mascota de la enfermera que contrajo el ébola. ¿Acaso vale más la vida de un can que la de un visón (y en este caso son más de 90.000)?

Y mientras, los usuarios de las redes hacen de las suyas y disparan su creatividad.