Con este Gobierno no hay día que no se den pasos hacia la demolición de lo que hasta ahora conocíamos como España. Ayer pactó con la Generalidad la financión singular para Cataluña, que supone romper la solidaridad con el resto de las comunidades al cederle la recaudación progresiva de todos los impuestos. Los socialistas García-Page y Adrián Barbón se mostraron en contra. Ahora sólo falta que los diputados socialistas castellano-manchegos y asturianos voten en contra durante su tramitación en el Congreso. ¿A que no?

Estas son las exclusivas del día: