En julio, el Índice de Precios de Consumo (IPC) elevó su tasa interanual dos décimas hasta quedarse en el 2,9%, según datos definitivos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Se trata del nivel más elevado desde hace más de cuatro años

Las causas de esta subida en la inflación han sido el encarecimiento de los servicios de alojamiento y de los alimentos y el hecho de que los precios de la telefonía se mantuvieran estables, frente al retroceso que experimentaron en el mismo mes de 2020.

En tasa mensual (julio sobre junio), el IPC cayó un 0,8% tras cuatro meses de aumentos. A ello también contribuyó el descenso del IVA en la electricidad, así como las rebajas de verano en vestido y calzado.

Por su parte, la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) situó su tasa interanual en julio en el 0,6%, cuatro décimas más que en junio y 2,3 puntos inferior al índice general. 

Recordó Hispanidad que el Banco Central Europeo (BCE) anunció que permitirá que se sobrepase el nivel de inflación anual del 2%… sin mover el precio del dinero ni la finalidad del mismo. Otra muestra de que los monetaristas han olvidado que el fin de la economía es fabricar bienes y productos que se compran y se venden con dinero, no fabricar dinero.