Con el lanzamiento de la cuenta Start, anunciado este lunes, ING se pone a la altura de los principales bancos españoles que ya ofrecen este tipo de producto a sus clientes. Se trata de captar a los hijos de los clientes cuando todavía son menores de edad, algo particularmente importante si tenemos en cuenta el tirón de los neobancos entre los jóvenes.
La cuenta Start de ING está dirigida a los menores entre 14 y 17 años. No tiene comisiones, ofrece una tarjeta de débito virtual y permite operar con Bizum, todo bajo la supervisión de un adulto, cliente del banco, naturalmente.
A este respecto, conviene resaltar que el 40% de los clientes de ING ya tienen más de 50 años de edad, el 45% tiene entre 33 y 50 y sólo el 15% tiene entre 18 y 32, según datos facilitados por la entidad, en 2024. En otras palabras, al tirón de los neobancos entre los jóvenes se suma el hecho de que la clientela de ING se hace mayor.
La entidad que dirige Alfonso Tolcheff desde el pasado mes de marzo, ya puso el foco en los jóvenes hace tres años, cuando lanzó la Cuenta NoCuenta, sin compromisos ni comisiones. El objetivo entonces era ganar escala, aunque los nuevos clientes no aportaran ni siquiera la nómina.
Ahora, con la cuenta Start, ING da un paso más y se centra en los hijos de los clientes. ¿Llega tarde? Ya lo veremos, porque no sólo tiene que lidiar con los bancos tradicionales, sino con los neobancos.











