Salvo dos meses del tercer trimestre, 2023 fue un año excepcional para los fondos de inversión, que cerraron el año con una rentabilidad récord del 7,6%, según el comunicado remitido este jueves por la patronal Inverco.

También aumentó significativamente el volumen de activos respecto al año anterior (+13,6%), hasta alcanzar un patrimonio de 347.830 millones de euros, un nuevo máximo histórico. La clave estuvo en el último trimestre, cuando la tendencia alcista de los mercados financieros aportó el 90% de ese crecimiento patrimonial, apoyado también por las aportaciones de los partícipes.

La estrella indiscutible fue la renta fija, concretamente a largo plazo, con unos fondos que aumentaron su patrimonio en 28.022 millones, un 31,3%, hasta los 117.536 millones. Los fondos de renta variable nacional, sin embargo, experimentaron una caída de patrimonio del 4,5% (-147.039 millones).

En cualquier caso, los peor parados, en términos porcentuales, fueron los fondos de renta fija mixta, que cerraron el año con un patrimonio de 31.830 millones, 3.634 millones menos, esto es, una caída del 10,2% respecto al año anterior. Lo siguientes fueron los fondos globales, cuyo patrimonio cayó un 7,5% (-4.726 millones) y cerró el ejercicio en los 58.082 millones de euros.