Con Salvador Jiménez abrimos esta nueva temporada de entrevistas, aquí en Hispanidad.

Nacido en Jumilla, tierra de vinos, Salvador es doble licenciado en Administración y Dirección de Empresas y Derecho por la Universidad de Murcia, Máster en Banca y Finanzas por Afi Escuela y CFA (Chartered Financial Analyst).

Socio en Afi, en el Departamento de Análisis Económico y de Mercados, donde empezó su carrera profesional en 2012, nos cuenta que, en este departamento, “el líder, y del que todos aprendemos día a día, es José Manuel Amor”… un veterano experto en análisis de mercado, ‘certero donde los haya’, y esto lo digo yo, que le conozco desde hace tiempo. 

La especialidad del invitado de hoy son los mercados de renta fija...,“por tanto, los temas que más me ocupan y preocupan son la política monetaria, la estabilidad financiera, las finanzas públicas, tipos de interés o la salud del sector empresarial... aunque para cualquier analista de renta fija, el pulso del ciclo y la inflación es clave”.

Así que, en un mundo con un elevado endeudamiento público, con políticas fiscales expansivas y bancos centrales más orientados al crecimiento que al control de la inflación, Salvador Jiménez tiene claro que no apostaría por la renta fija como producto estrella para el próximo lustro.

-Diez meses han transcurrido de este ‘movidito’ 2025. ¿Qué es lo que destacaría o qué es lo que más le ha preocupado?

Sin duda, la evolución de las variables financieras en 2025 ha estado marcada por el impacto de de la agenda Trump en su segundo mandato, siendo especialmente relevante su ofensiva comercial que está llevando los aranceles en EEUU a niveles no observados desde la segunda guerra mundial. No obstante, como analista de renta fija, merece la pena destacar los avisos, en determinados momentos durante el ejercicio, de los episodios llamados bond vigilantes en países considerados líderes mundiales como Francia, Reino Unido y el propio EE.UU.

La evolución de las variables financieras en 2025 ha estado marcada por el impacto de la agenda Trump en su segundo mandato

-Y, ¿lo mejor?

Quizás podría destacarse los avances en inteligencia artificial que puede ser un motor clave de crecimiento en los próximos años y la resiliencia de las economías pese a estar en uno de los entornos geopolíticos más complejos de los últimos 80 años. Esto ha supuesto que, a pesar de todo, el desempeño de los mercados bursátiles en 2025 haya sido extremadamente positivo.

-Estos tres meses que tenemos por delante, ¿cómo se presentan en cuanto a renta fija y a renta variable?

Es difícil pensar que en renta variable pueda haber catalizadores adicionales en esta parte final del año para observar ganancias relevantes. Más bien, creo que en un intento de recoger beneficios por parte de los inversores y dados los distintos frentes abiertos (guerra comercial China-EEUU sin resolver, dudas acerca de la evolución de la inflación en EE.UU., etc.) podría haber alguna corrección, que puede ser una buena oportunidad para aumentar peso. En renta fija tampoco tengo unas expectativas favorables para la última parte del año, dados los niveles actuales tanto de los tipos libre de riesgo y los diferenciales de crédito, salvo que haya un deterioro cíclico en EEUU mayor al que esperamos a día de hoy.

-¿De qué tiene que estar pendiente el mercado?

Será clave las decisiones que tome la Reserva Federal de política monetaria y los cambios en el seno del FOMC en los próximos meses, con el vencimiento del mandato de un gobernador y el fin de la presidencia de Powell (nombramientos alejados de la ortodoxia podrían generar incertidumbre en los bonistas) y la evolución de la inflación en EE.UU.. Por supuesto, el foco también estará en los avances en la guerra comercial entre China y EE.UU. y la rentabilidad que las compañías comiencen a generar de sus elevadas inversiones en infraestructura asociada a la inteligencia artificial.

La inteligencia artificial puede ser un motor clave de crecimiento en los próximos años junto a la resiliencia de las economías pese a estar en uno de los entornos geopolíticos más complejos de los últimos 80 años

En el mediano plazo es muy importante el seguimiento del elevado endeudamiento público, como bien alertaba recientemente el FMI. En la actualidad, el favorable comportamiento de los mercados financieros se debe, en parte, a que el endeudamiento está principalmente en manos del sector público y no en el sector privado /a diferencia de 2008, por ejemplo). La situación es mucho más fácil de gestionar, pero hay que tener cuidado, porque si se genera un episodio de volatilidad extrema consecuencia del elevado endeudamiento público, las consecuencias pueden ser igual de catastróficas.

-Lecornu, primer ministro francés, amagó con irse pero, finalmente, se queda. Francia tiene ahora la peor prima de riesgo de Europa y….muchísimos problemas. La deuda sigue, ahí, tienen que atajarla y parece que a los franceses no les gusta que les digan la verdad, ¿no cree?

En Francia, como bien dices, es preocupante el nivel de deuda, pero, sobre todo, la incapacidad política que se observa para conseguir reducir el déficit público desde cerca del 6% actual (muy por encima del 3% que marca la UE). Todo ello en un momento de crecimiento económico anémico y una tensión social muy elevada.

El modelo de bienestar francés, aunque históricamente ha sido un referente europeo, se ha vuelto insostenible en el contexto actual. El elevado gasto público y la rigidez institucional requieren reformas estructurales urgentes para garantizar su viabilidad sin comprometer la competitividad económica del país.

-Todo esto, ¿puede desembocar en una crisis de deuda en el euro?

Creo que estamos en una situación muy distinta a lo que ocurrió en 2011-2012. Desde entonces, la UE ha dado pasos, aunque aún insuficientes, significativos, como estrategias más flexibles por parte del BCE (utilizando instrumentos de política monetaria no convencional -compras de deuda, Transmission Protection Instrument, subastas ilimitadas de iliquidez-) o la emisión conjunta de deuda por volúmenes significativos, que marcó un hito en la mutualización fiscal. Además, no hay que olvidar que Francia tiene margen para actuar y solventar su situación en el medio plazo, pero, de momento están dando patadas hacia delante. De seguir así, llegará un momento en el que el mercado le obligará a tomar medidas “por las malas”.

Es difícil pensar que en renta variable pueda haber catalizadores adicionales en esta parte final del año. Más bien, creo que en un intento de recoger beneficios por parte de los inversores y dados los distintos frentes, podría haber alguna corrección

-Tal y como está la situación en el país, ¿puede ser interesante la deuda francesa porque da mayor interés?

Es un hito para los bonistas el poder comprar deuda francesa a una rentabilidad superior a la que ofrece la deuda española o similar a la italiana, por tanto, sí se puede considerar una opción interesante y se está observando como la deuda francesa está formando parte de las carteras de renta fija de inversores españoles a diferencia de hace unos años. Pero hay que ser prudente y aumentar ese peso de forma progresiva. Por un lado, si Francia no revierte su situación fiscal relativamente pronto, el castigo podría continuar y, por otro lado, pensamos que no es una oportunidad que desaparecerá rápido.

-¿La periferia europea (Italia y España) es ahora una mejor alternativa frente a Alemania, por ejemplo?

Más que una mejor alternativa, diría que es complementaria. La deuda española, bien valorada ahora por los inversores, te ofrece una rentabilidad adicional, pero ojo, si la situación se complica de forma severa en la zona euro, la mejor alternativa seguirá siendo Alemania y el verdadero activo refugio.

-Una vez que Europa descuenta que, de momento, no habrá más bajadas de tipos, para el que está invertido en renta fija no es un buen escenario, ¿no es así?

En Europa no se observan problemas por el lado de la inflación, por tanto, se podrían descartar esos escenarios más negativos para la renta fija. Pero a los niveles actuales de Tir, y si realmente Alemania emite todo el papel que está previsto, sí, parece complicado obtener rentabilidades atractivas en la renta fija europea en el corto y medio plazo.

Salvador sentado

 

-Le he escuchado decir que le preocupa el mundo al que vamos porque tendrá que absorber muchas más emisiones soberanas por ese mayor endeudamiento

Efectivamente, así será y, por tanto, no parece óptimo en estos momentos tener en las carteras globales una elevada sobreponderación en renta fija, porque este hecho podrá acabar pesando en los tipos de interés, especialmente en los tramos largos de la curva. Más si cabe cuando el crédito corporativo tampoco ofrece diferenciales suficientemente atractivos.

-¿Se van a convertir los bonos soberanos en producto estrella frente a la renta variable?

No lo creo. En un mundo con un elevado endeudamiento público, con políticas fiscales relativamente expansivas y bancos centrales más orientados al crecimiento que al control de la inflación, no apostaría por la renta fija como producto estrella para el próximo lustro.

El modelo de bienestar francés, aunque históricamente ha sido un referente europeo, se ha vuelto insostenible en el contexto actual

-Primera jefa de Gobierno en Japón, Sanae Takaichi, favorable a mayor gasto público y tasas de interés bajas, en línea con su mentor, el fallecido ex primer ministro Shinzo Abe. ¿Qué opina?

El fin de la alianza de más de 20 años entre Komeito y el LDP, aunque no descarta la posibilidad de que Takaichi sea elegida primera ministra, sí debilita su posición parlamentaria, reforzando la necesidad de ampliar negociaciones con partidos minoritarios para obtener mayoría suficiente en la Cámara Baja. Por ello, un escenario de amplia expansión fiscal pierde probabilidad.

-Japón tiene la deuda pública más alta del mundo, por encima del 250%. Y le pregunto, con ironía, claro está, con estos niveles ¿por qué preocuparse de la de EEUU que es del 120%?

Hay que tener en cuenta una serie de factores relevantes en el caso nipón: más del 90% de la deuda se encuentra en manos domésticas, los tipos de interés han sido extremadamente bajos, es un país que goza de una elevada credibilidad institucional y que presenta un superávit por cuenta corriente. No obstante, es evidente que, si los tipos de interés en Japón empiezan a aumentar de forma sustancial, las dudas pueden aumentar.

En EEUU más que el nivel de deuda PIB, preocupan algunas dinámicas no propias del país líder. EEUU presenta de forma persistente déficits públicos y por cuenta corriente, pero esto no era un problema por la elevada entrada de flujos extranjeros y la dominancia del USD. No obstante, si implementas políticas que alimentan la desconfianza inversora, puedes perder ese privilegio exorbitante. Y, por supuesto, también preocupan las injerencias del poder ejecutivo en organismos independientes como puede ser la Reserva Federal.

-El bono estadounidense ‘pasa’, permítame la expresión, del ‘cierre del Gobierno’ y mantiene rentabilidades. ¿No debería tensarse algo más debido a un mayor riesgo de déficit y dificultades de pago?

Este es otro evento que tampoco es propio del país líder a nivel global. No obstante, el mercado lo toma más como una cuestión técnica que se resolverá en el corto plazo, que como un problema estructural que pueda suponer un riesgo para los acreedores.

No se puede omitir que la consolidación fiscal en España se explica fundamentalmente por la parte cíclica y no se ha aprovechado la fase expansiva para alcanzar una reducción superior del endeudamiento

-¿Qué es lo que está pasando para que los bancos centrales hayan decidido mantener reservas de oro, como activo refugio fundamental, frente a bonos del Tesoro estadounidense y el dólar?

Básicamente un aumento de la desconfianza hacia EE.UU. por todos los factores anteriormente comentados.

-Las tres grandes agencias de calificación crediticia han mejorado la nota de España, una tras otra. Sin embargo, las tres alertan sobre lo mismo: la fragmentación política frena las reformas y también la inversión. ¿Qué opina?

Estas mejoras de rating se apoyan en que España presenta un crecimiento superior a la media de la zona euro, con un elevado dinamismo de las exportaciones de servicios de alto valor añadido, reduciendo la dependencia del turismo. Además, desde un punto de vista más estructural, cabe destacar el fuerte desapalancamiento del sector privado en la última década, reduciendo la sensibilidad a cambios en las condiciones financieras y shocks económicos. No obstante, no se puede omitir que la consolidación fiscal en España se explica fundamentalmente por la parte cíclica y no se ha aprovechado la fase expansiva para alcanzar una reducción superior del endeudamiento.

-Moody´s avisa de que analizará una revisión a la baja si crece el riesgo político interno…

Es evidente que la situación política actual impide adoptar reformas necesarias que nuestra economía aún tiene pendientes, pero pensar que en el corto plazo puede haber una revisión a la baja por cuestiones políticas parece muy poco probable.