Demetrio Carceller Arce, presidente de Damm, se muestra satisfecho con los resultados de 2023 y tiene buena perspectiva para 2024
Damm ha dado alegrías a la familia Carceller y a la alemana Oetker… sobre todo, por la inflación, pues ha logrado elevar ventas y beneficio en 2023, pese a que también ha afrontado mayores costes. Unos resultados que, al igual que el reparto de dividendo, se han aprobado en la Junta General de Accionistas celebrada este lunes y que se incluyen en su último informe anual.
El grupo cervecero catalán -que también se dedica a agua (con las marcas Veri y Fuente Liviana, entre otras), refrescos, batidos (Cacaolat), restauración (la cadena especializada en sándwiches Rodilla) y logística- tiene como primer accionista a la familia Carceller (a través de la petrolera Disa), con un 27,19%; seguida de la familia alemana Oetker (dueña del 50,7% de Freixenet y del grupo Dr. Oetker -conocido por sus pizzas congeladas-, entre otros activos), con un 25,014%. Tras ellos, se encuentra con un 13,951% del capital Seegrund, sociedad neerlandesa propiedad del fallecido Demetrio Carceller Coll, padre del presidente de Damm y Disa, Demetrio Carceller Arce. Y a bastante distancia está la sociedad La Moravia D’Inversions, propiedad de la familia Armadàs, con un 6,056%; y la sociedad Boag Valores, de la familia Agenjo, con un 5,126%.
Volvamos a los resultados de Damm, que en parte se han beneficiado de la inflación. En 2023, ha vendido 20,8 millones de hectolitros de bebidas un 3,7% menos que el año anterior (21,6 millones). Sin embargo, el grupo presume de “sólida demanda” en los diferentes mercados y canales, así como de superar por primera vez en su historia los 2.000 millones de euros de facturación y hacerlo dos antes de lo previsto en el plan estratégico 2022-2025.
En concreto, la facturación ha crecido un 10%, a 2.061 millones, frente a los 1.876 millones facturados en 2022 y los 1.488 millones logrados en 2021, a pesar del menor volumen de ventas. Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) ha crecido un 24,6%, a 300 millones; y el beneficio neto ha aumentado un 28,2%, pasando de 101 a 130 millones; gracias a un “importante esfuerzo de control de costes”.
Carceller Arce ha señalado que “la fortaleza de la demanda interna de nuestros productos, las perspectivas positivas del turismo, y el desarrollo internacional de nuestra distribución, nos hacen confiar que 2024 será también un año de crecimiento para Damm”. Esto no sólo es bueno para sus accionistas, sino también para sus 5.765 empleados. Además, no hay que olvidar que Damm es tercer accionista de Ebro Foods (el líder mundial en arroz y segundo fabricante de pasta), con un 11,686% del capital; y la familia Carceller, a través de Disa, es dueña del 14,598% de Sacyr.