Gotham, en el ojo del huracán, admite que se forra hundiendo empresas
Qué coincidencia. Justo cuando se conocía que Gotham City Research, el fondo bajista estadounidense que atizó a Grifols el pasado mes de enero con un informe demoledor sobre su contabilidad, ha sido expedientado por la CNMV por manipular el mercado, el propio Gotham contraataca y presenta hoy un análisis negativo sobre una empresa europea.
Horas antes, ya calentaba el mercado con una breve frase en X: "New report tomorrow. Europe", es decir, ‘Nuevo informe mañana. Europa’… que ya tiene nombre propio: Mutares, compañía alemana de Baviera, con sede en Munich, que se dedica a la compra empresas que necesitan reestructuración.
Gotham denuncia (a groso modo) que la posición de efectivo que dice tener Mutares no es la que dice tener, y que cada vez depende más de la deuda.
“Estamos hablando de una empresa muy pequeña que está fuera de la cartera de los inversores, lo que podríamos denominar un ‘chicharro’ de la Bolsa alemana”, señalan los expertos consultados para añadir que este tipo de compañías tienen estructuras societarias bastante complejas, con muchas filiales, lo que hace muy difícil discernir dónde está, o cuál es la deuda consolidada del conjunto del grupo “y es ahí donde se tiene que centrar el análisis por parte de quién corresponda”.
Las 'posiciones cortas' son la estrategia de los cazachollos financieros”, enfatizan los analistas, “que buscan obtener suculentos beneficios en Bolsa apostando por el desplome de determinadas acciones y, en algunos casos, provocándolo, como hace Gotham
De momento el encargado es Gotham, meridiano respecto a sus objetivos al comienzo de su informe y que dice textualmente:
“Al momento de publicación de este Informe, GOTHAM CITY RESEARCH LLC, General Industrial Partners LLP y sus afiliadas, en conjunto, mantienen posiciones cortas correspondientes al 1,094% (233,556 acciones) del capital social total emitido al 25 de septiembre de 2024 en emisor mencionado en este Informe y obtendrán ganancias en caso de que las acciones del emisor caigan, lo que puede ocurrir tan pronto como se publique el Informe o en cualquier momento posterior. Por lo tanto, si bien GOTHAM CITY RESEARCH LLC y General Industrial Partners LLP han hecho todos los esfuerzos posibles para presentar la información contenida en el Informe de manera objetiva, el lector del Informe debe tener en cuenta que los intereses de GOTHAM CITY RESEARCH LLC y General Industrial Partners LLP y el de sus afiliados es ver caer el precio de las acciones del emisor”.
“Es crucial que los reguladores se aseguren que Gotham no tiene interés alguno en esos informes”, advierten los analistas, “y de que ha tomado posiciones cortas anticipando el desplome que puede producirse en la cotización de la empresa atacada”.
Lo primero está pendiente de confirmar, pero, de lo segundo, no hay duda.
Esta forma de actuar es la que desencadenó la tormenta bursátil de Grifols después del análisis publicado sobre la compañía el 9 de enero de este año, al que siguieron unos cuantos más.
Una manera de proceder que ha llevado a la CNMV, (que se ha tomado su tiempo, la verdad), a presentar sendos expedientes sancionadores contra Gotham City Research y General Industrial Partners (GIP), por manipulación de mercado en las acciones de Grifols e incumplir las previsiones del Reglamento sobre Abuso de Mercado en materia de recomendaciones de inversión, y también contra Grifols, por defectos en la información financiera y en los informes de gestión.
El planteamiento teórico de dedicarse a buscar compañías, y detectar sus problemas, incluso su falta de transparencia, sobre todo las que están sobrevaloradas por el mercado, eso, en sí mismo, no es censurable, pero, ¿no debería ser labor de los reguladores?
Gotham podría estar incumpliendo el artículo 284 del Código Penal. Ojo, que podría haber cárcel de por medio, además de multa. Pero eso lo tendrá que decidir la Fiscalía.
“Todo movimiento, en este sentido, es interesado”, explican fuentes del mercado respecto a la forma de trabajar del fondo bajista, y recuerdan que también, en el caso de Grifols, el fondo deshizo posiciones de manera inmediata porque sabía que la acción no tenía más recorrido. Es más, si nos fijamos, la cotización de Grifols está ahora prácticamente en los mismos niveles que tenía tras el desplome de enero”
Gotham City Research adquirió una posición bajista del 0,57% en Grifols justo antes de difundir el informe, es decir, que se posicionó en corto.
Y cuando se habla de posiciones cortas se habla de especulación pura y dura, es decir, de aquella manera de actuar en los mercados que se prohibió, en la era Covid, porque estaba machando a las empresas.
“Las 'posiciones cortas' son la estrategia de los cazachollos financieros”, enfatizan los analistas, “que buscan obtener suculentos beneficios en Bolsa apostando por el desplome de determinadas acciones y, en algunos casos, provocándolo como hace Gotham”.
Es cierto que, la actuación de fondo puso sobre la mesa una serie de irregularidades en la gestión de Grifols y, sobre todo, destapó el elevado endeudamiento de la compañía. “Cuando una empresa no es transparente”, señalan estas mismas fuentes, “genera dudas y las dudas generan desconfianza. Eso es lo que refleja ahora mismo la cotización de Grifols porque, si no hubiera tenido nada que ocultar, el nerviosismo del mercado se hubiera disipado en 4 días”.
El planteamiento teórico de dedicarse a buscar compañías, y detectar sus problemas, incluso su falta de transparencia, sobre todo las que están sobre valoradas por el mercado, eso, en sí mismo, no es censurable, pero, ¿no debería ser labor de los reguladores? Pues, al parecer no porque no tienen ni medios ni capacidad.
“En tal caso”, argumenta Nicolás López, director de renta variable de Singular Bank, “se pondría en cuestión a los auditores”.
Mutares. Estamos hablando de una empresa muy pequeña que está fuera de la cartera de los inversores, lo que podríamos denominar un ‘chicharro’ de la Bolsa alemana”
Recuerda López el caso de la tecnológica alemana Wirecard “con una contabilidad falsa que su auditor no fue capaz de ver”.
Su cúpula directiva fue acusada de fraude contable, manipulación del mercado, abuso de confianza particularmente grave y estafa en grupo organizado.
La empresa se desplomó en bolsa en junio de 2022 después de reconocer que un cuarto de sus activos, cerca de 2.000 millones de euros no existían, lo que puso en la picota al supervisor alemán de los mercados financieros y a la empresa de auditoría, la multinacional EY.
Recordar que, en el caso, Grifols, la CNMV ya no actuó como se supone que debería haber actuado el 9 de enero, es decir, suspendiendo la cotización de Grifols, el primer día en el que se hizo público el informe de Gotham.
Es más, ha tardado nueve meses en pronunciarse, y, en ese tiempo, ha pasado de todo en Grifols, incluyendo el desamparo de los minoritarios a los que se supone que debe proteger.