CIE Automotive ha seguido pisando el acelerador en el año que celebra su 25 aniversario. Y es que ha disparado el beneficio neto un 75%, hasta 206,1 millones de euros, en los nueve primeros meses del año, y las ventas han aumentado un 23%, a 2.456,7 millones.
La compañía vasca de fabricación de componentes automovilísticos ha presentado buenos márgenes en todas sus zonas geográficas y ha elevado su cuota un 26%, 16,5 puntos porcentuales por encima del mercado (+9,5%). Asimismo, el Ebitda se ha elevado un 53%, hasta 434,2 millones, y al mismo tiempo se ha reducido la deuda neta a 1.518,1 millones, por lo que el ratio de deuda neta sobre Ebitda ha pasado de 4,09 veces a 2,56.
La empresa, que tiene Antonio María Pradera como presidente y a Jesús María Herrera como CEO, se ha situado en niveles preCovid pese a haber producido 10,2 millones de coches menos por la crisis de chips y del impacto negativo del tipo de cambio (-158 millones en ventas y -15 millones en resultado neto). También ha cerrado los nueve primeros meses del año con una liquidez de 1.194 millones. “Aun con todas las disfuncionalidades actuales del mercado, que están estresando las cadenas de suministro como nunca antes (disrupciones logísticas, escasez de semiconductores, encarecimiento de materias primas y energía, etc.), nuestro compromiso con la generación de valor y con nuestros accionistas se mantiene intacto”, ha destacado Herrera, y además, la generación de caja operativa ha ascendido a 367,4 millones.