Aun sin conocerlo en profundidad, el 80% de la población en España cree que el euro digital aumentará el control del Gobierno sobre los pagos, más de la mitad considera que no garantizará el mismo nivel de privacidad que el efectivo, según el V Barómetro sobre el dinero en efectivo, realizado por Gad3 para Denaria, presentado este lunes.
El BCE está acelerando el lanzamiento del euro digital e insiste en que se trata de un complemento al efectivo y que no pretende, bajo ningún concepto, sustituirlo. La población española, sin embargo, desconfía… y hace bien. Sólo cerca de la mitad lo percibe como complementario al efectivo y, además, estima que, con el tiempo, terminará reemplazándolo.
Paradoja, al menos en apariencia: el efectivo sigue percibiéndose como el método de pago que mejor garantiza la seguridad y la privacidad, y el que más ayuda a controlar el gasto. Sin embargo, el método de pago más utilizado (52%) sigue siendo la tarjeta, por delante, precisamente, del efectivo (30%).
El apagón del pasado mes de abril marcó un antes y un después. Desde esa fecha, el dinero en efectivo ha pasado a ser el segundo recurso más importante ante una situación de crisis, sólo por detrás del agua y los alimentos, y por delante de la salud y la energía. Además, desde el apagón, el 35% de los encuestados mantiene una mayor cantidad de efectivo en casa, porcentaje que se aproxima al 50% entre los jóvenes de 18 a 29 años.











