El 11 de abril será la Junta General de Accionistas de Caixabank, en Valencia. Eso significa que en el último consejo un mes antes de la Convocatoria, es decir, el de febrero han de haberse aprobado los relevos en el Consejo. 

Pues bien, para el Consejo de Caixabank, correspondiente a febrero, que tendrá lugar el jueves 20 de febrero, está previsto el punto final a la historia de Bankia. 

Ese día saldrán los tres últimos representantes de Bankia, fruto de la fusión de 7 cajas de ahorro, alrededor de Cajamadrid y de la valenciana Bancaja, que fuera reflotada con dinero público (3.000 millones de euros).

Se trata de Eva Castillo, Joaquín Ayuso y Javier Campo. Los tres serán relevados, así como Teresa Santero, representante del Estado (FROB).

Por cierto, que el FROB tiene la tentación, y no se sabe si caerá en ella, de solicitar un segundo consejero en nombre de su 17% de la capital. Tiene derecho, pero entonces resulta que Fundación Caixa podría reclamar cinco vocales, cuando ahora mismo tiene tres.

No, no sería muy bien recibida la sugerencia.

Y el Gobierno no tiene ninguna prisa en marchar. Y no porque si se queda más tiempo vaya a recuperar el dinero público invertido en el reflotamiento de Bankia, pero a este Gobierno le encanta influir, por si no se habían dado cuenta.

Bankia ha tenido un historia corta y accidentada. Y no se fusionó con Caixabank, fue absorbida, que no es lo mismo.