Isabel Serra es la candidata de Podemos para presidir la Comunidad de Madrid. En un encuentro organizado por Nueva Economía Fórum ha dejado claros dos aspectos: siente rechazo hacia lo privado y nunca se puede ser demasiado feminista. Así, al combinar ambos, el resultado es una de las propuestas que pregona con más orgullo: “escuelas públicas, laicas gratuitas y de calidad”. Además, en sus colegios los niños -y niñas- tendrán una asignatura extra… sobre feminismo, “igualdad afectivo-sexual” y “derechos sexuales y reproductivos”, entre otros. En otras palabras, como romper matrimonios y como abortar.

A nivel autonómico la disciplina sería optativa, pero ojo: a nivel estatal se convertiría en una materia troncal. Va más allá de las charlas LGTB de Cristina Cifuentes y pretende enseñar desde una “temprana edad” -no concreta el curso desde el que se empezaría a impartir- la igualdad de género. “Es una forma de evitar tanto acoso”, afirma la candidata, que poco antes cargaba contra las escuelas concertadas y privadas. Para validar su medida pone como ejemplo a Save the Children, gran defensor de la igualdad de género.

Podemos retoma la libertad de enseñanza de Picornell, del siglo XVIII: “Los hijos pertenecen más a la República que a sus padres

Según Serra, el hecho de que haya colegios que “segregan por sexo” es un atentado contra la igualdad de género. Cabe destacar que varios estudios concluyen en que la educación diferenciada garantiza el éxito escolar, ya que atiende a los problemas propios de cada sexo; porque entre hombres y mujeres hay diferencias biológicas que afectan a ámbitos psicológicos y este tipo de enseñanza puede centrarse en cada uno de ellos.

Le preguntan a la candidata que, si son los padres quienes demandan una educación concertada para sus hijos, cuál sería su postura. Insiste Serra en la formación “pública y laica”… sin caer en que su propuesta carece de constitucionalidad. Y es que el artículo 27 de nuestra Constitución afirma que “los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”. Podemos retoma así la libertad de enseñanza de Picornell, del siglo XVIII: “Los hijos pertenecen más a la República que a sus padres”.

Para haber hecho Podemos una campaña electoral basada en la Constitución, se la ha leído lo justo.