Un jurado en Estados Unidos, orientado por el juez pro-aborto William Orrick, acaba de condenar al activista católico provida David Daleiden, investigador del Center for Medical Progress (CMP), a pagar 870.000 dólares a la patronal abortista Planned Parenthood por haber filmado con cámara oculta a su personal vendiendo y tasando partes de bebés abortados, informa Religión en Libertad.

Los vídeos son escenas reales que se grababan en restaurantes, en cócteles y en jornadas abiertas de empresarios abortistas: aparecen distintos responsables de clínicas comentando la comida y la bebida que toman mientras, de paso, explican lo frescos que son los sesos, pulmones o riñones de fetos abortados que venden. El CMP empezó a hacer circular los vídeos por Internet en 2015 y 2016.

La sentencia afirma que los vídeos han causado “un daño sustancial” a Planned Parenthood

Daleiden señaló que Planned Parenthood ganaba dinero con esas ventas que serían ilegales de acuerdo a la ley federal. El tema llegó a generar una investigación del Congreso contra la patronal abortista. Los abogados de Daleiden explicaron que él también estaba investigando varios crímenes contra niños nacidos vivos en instalaciones de Planned Parenthood.

El juez William Orrick ordenó repetidamente al jurado que declarara culpable de intrusión a Daleiden. Repitió al jurado que no debían tener en cuenta nada descubierto por Daleiden anterior a 2012, añade Religión en Libertad.

Los abogados de Planned Parenthood insistieron en decir que las acciones del líder provida “no buscaban revelar crímenes y no era algo periodístico. Solo buscaba, por cualquier medio incluyendo los ilegales, destruir a Planned Parenthood”. El jurado ha dictaminado una característica psicológica: que Daleiden investigaba con “malicia”, por lo que debe pagar por daños y perjuicios.

Ya en julio de 2017 el mismo juez Orrick determinó que Daleiden debía pagar una multa de 137.000 dólares por "desacato" al difundir vídeos de otra patronal abortista, una reunión de la Federación Nacional de Aborto (la NAF, ahora dirigida por una sacerdotisa lesbiana episcopaliana), después de que una orden federal prohibiera su publicación, añade este medio.

“Este es un peligroso precedente que envía el mensaje de que hablar con la verdad y los hechos para criticar a los poderosos ya no es algo protegido por nuestras instituciones”, lamentó el Center for Medical Progress (CMP)

En una declaración, el CMP de Daleiden protestó: "Mientras importantes testigos señalan durante seis semanas que Planned Parenthood vendió órganos fetales de manera consistente, un juez parcializado y cercano a Planned Parenthood pasa esas mismas seis semanas influenciando al jurado con fallos ya existentes y suprimiendo la evidencia de video”.

“Este es un peligroso precedente para el periodismo ciudadano, la Primera Enmienda y los derechos civiles en todo el país ya que envía el mensaje de que hablar con la verdad y los hechos para criticar a los poderosos ya no es algo protegido por nuestras instituciones”, lamentó el CMP.

David Daleiden en 2015 explicó en una entrevista con Jim Graves para el National Catholic Register que su activismo provida le llevó a la fe católica.

"Crecí en un hogar culturalmente católico. Yo mismo soy hijo de una crisis de embarazo, mi madre se quedó embarazada de mí en su primer año de universidad y dio a luz durante el segundo. Mis padres se casaron cuando concluyó los estudios, y de hecho yo aparezco en sus fotos de boda", explicó, según Religión en Libertad.

David se unió con 15 años a su primer grupo provida. "También era un adolescente cuando descubrí la forma extraordinaria de la misa [misa tradicional o de San Pío V] y me tomé más en serio mi fe", añade.

"Para mí, la peor reacción es la de quien decide no ver los vídeos y, por el contrario, repite como un papagayo la estrategia mediática de los aliados de Planned Parenthood"

Durante sus estudios mantuvo su "pasión" por la lucha provida: "Se me hizo claro que es lo que Dios quería que hiciese. Desde una perspectiva católica, pienso en ello como mi vocación. Cuando hago este trabajo, me acerca a Dios, a un mayor grado de intimidad con Él. Puesto que espiritualmente la lucha provida me beneficiaba, pensé centrarme en ella a tiempo completo". "Lo que más me influye espiritualmente es la forma extraordinaria de la misa, el mensaje de Nuestra Señora de Fátima ya la enseñanza pastoral del Papa Francisco, además de la influencia de mi párroco y de los sacerdotes de la Fraternidad de San Pedro", explicaba en 2015.

En esa misma entrevista de 2015 explicaba: "Nos llamó la atención cómo afecta a muchos médicos aborteros su trabajo. Racionalizan o intelectualizan lo que hacen de todas las maneras posibles, o reconducen la discusión, de modo que no tengan que afrontar las consecuencias de sus actos. No quieren afrontar la turbación o el remordimiento que sienten".

Los vídeos tuvieron mucho más impacto del que esperaban. "Nos dimos cuenta de que teníamos una gran historia, pero no previmos la magnitud de la respuesta que iba a venir. Diez candidatos presidenciales, por ejemplo, han comentado los vídeos". En efecto, la práctica totalidad de los candidatos republicanos (pidiendo que Planned Parenthood deje de recibir subvenciones públicas) y demócratas (con el reiterado apoyo explícito de Hillary Clinton a Planned Parenthood) se han tenido que pronunciar al respecto.

"He recibido algunas amenazas, incluyendo algunas personas que dicen que me seguirán hasta mi casa y me harán cosas malas". Pero, para David, ésa no es la peor respuesta: "Para mí, la peor reacción es la de quien decide no ver los vídeos y, por el contrario, repite como un papagayo la estrategia mediática de los aliados de Planned Parenthood".