Luis Gallego, presidente de Iberia, ha advertido que las aerolíneas saldrán de “la peor crisis de la historia de la aviación” más pequeñas y mucho más endeudadas. La antigua aerolínea de bandera española (hoy integrada en el holding IAG, del que Gallego será CEO a partir del 24 de septiembre) no se librará: “será más pequeña en el próximo lustro y no va a ser un tema temporal, va a ser un tema estructural”.

Así lo ha señalado en la Cumbre empresarial de la CEOE, remitiendo a cifras de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), que estima que la deuda de las aerolíneas será 120.000 millones de dólares mayor que antes de la crisis del coronavirus, lo que dificultará la recuperación. Asimismo, esta organización prevé que las aerolíneas pierdan 84.000 millones de ingresos, mucho más que en la anterior crisis económica (31.000 millones), y que sólo en el segundo trimestre, quemen 61.000 millones de caja.

El presidente de Iberia ha recordado que dicha aerolínea comenzó la crisis mejor que otras, pero también va a sufrir impacto, y “resulta difícil competir con otros países, donde las cantidades disponibles han sido superiores y con mayores garantías del Estado”. Asimismo, ha criticado que otras han recibido “ayudas difícilmente justificables, poniendo en peligro el mercado europeo de libre competencia”. Y ha anunciado que en julio, Iberia operará una quinta parte del operativo que tenía en corto y medio radio, y que será reducido en largo radio. 

Gallego ha pedido que los ERTE se amplíen, al menos, hasta final de año y que se desbloquee la llegada del AVE a la T4 del aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas. lo que contribuiría a elevar en medio millón los pasajeros del hub de Madrid. Además, ha insistido en que se debe impulsar el cielo único europeo y rebajar las tasas, “no es momento de revertir reformas eficaces”, y ha añadido que “la aviación europea necesita un plan renove” para contribuir a que el sector sea más sostenible.