El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha asegurado este jueves que el grupo terrorista islamista Estado Islámico está a punto de sucumbir en el este de Siria, donde está tratando de esconder a sus milicianos entre la población civil para evitar que sean abatidos, publicó DPA.

El sábado, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una alianza de milicianos kurdos y árabes apoyada por Estados Unidos, comenzó una ofensiva para expulsar al grupo terrorista de la localidad de Baghuz, su último bastión en la provincia de Deir Ezzor.

"Estado Islámico está teniendo su último aliento en la zona con sus elementos ahora escondiéndose entre los civiles en busca de protección", ha dicho el director de la organización con sede en Londres y con una amplia red de activistas desplegados en territorio sirio, Rami Abdel Rahman.

"Están confinados en los campamentos en las zonas rurales de la orilla oriental del río Éufrates", ha explicado el director del Observatorio Sirio

"Están confinados en los campamentos en las zonas rurales en la orilla oriental del río Éufrates", ha explicado el director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, en declaraciones a DPA.

Un comandante de las FDS que se identifica como Adnan Afrin ha dicho que los milicianos que quedan de Estado Islámico están determinados para tratar de resistir hasta el final. "En los últimos días, Estado Islámico ha utilizado mujeres combatientes como terroristas suicidas contra nuestras fuerzas en vanguardia para retrasar nuestros movimientos", ha señalado.

Los combatientes de las FDS han contado con el apoyo de los ataques aéreos de las fuerzas de la coalición militar liderada por Estados Unidos. El grupo terrorista fundado por Abú Bakr al Baghdadi todavía tiene presencia en la zona desértica al norte de la ciudad de Al Sujna, a unos 50 kilómetros de Deir Ezzor.